VALENCIA. La Real Sociedad ha agradecido hoy los servicios prestados durante esta temporada a tres de los cuatro jugadores que han estado cedidos, entre ellos el central mexicano Diego Reyes, que, de momento, volverá al Oporto, mientras sigue a la espera de resolver el futuro del argentino Gero Rulli.

La opción de reforzar la defensa de la próxima temporada con Reyes satisfacía al entrenador Eusebio Sacristán, pero el director deportivo Lorenzo Juarros, Loren, ya anticipó hace un par de semanas que su continuidad "estaba muy complicada" porque pertenece al club portugués.

Si la llegada este verano de Reyes para una nueva cesión está más que difícil, los que están ya definitivamente descartados para seguir un año más en San Sebastián son el joven portugués Bruma, que regresa a Galatasaray, y el portero Oier Olazabal que lo hará al Granada.

La Real, en el comunicado difundido hoy recuerda que ambos, al igual que Reyes, "finalizan su vinculación el jueves 30 de junio", por lo que agradece a los tres futbolistas "la profesionalidad, compromiso y dedicación que han demostrado durante esta temporada" y les desea lo mejor a nivel personal y profesional.

El cuarto jugador que tenía cedido la Real la pasada temporada, el argentino Gero Rulli, representa un caso distinto, ya que todo apunta a que el conjunto vasco podrá hacerse con sus servicios en propiedad pero las negociaciones no terminan de culminar con la rúbrica de los acuerdos.

El portero sudamericano, que se concentra con Argentina para la disputa de los Juegos Olímpicos, se ha marchado hace escasos días de San Sebastián sin firmar su contrato con un "hasta pronto" en un vídeo que ha colgado en su cuenta twitter, en el que integra imágenes de la capital donostiarra y del estadio de Anoeta al que confía en regresar.