La renovación del alero centroafricano por una temporada más, confirma que la entidad taronja vuelve a optar por una plantilla de trece jugadores que pueda sobreponerse a los contratiempos que aparezcan, como el estado físico de Van Rossom
VALENCIA. Cuando el movimiento en La Fonteta apuntaba a la llegada de un pívot y a resolver la salida, o no, de Guillem Vives, Valencia Basket ha cerrado, en menos de 24 horas, la posición de alero para la próxima temporada. Al fichaje de Vladimir Jankovic se le une la renovación de Romain Sato por una temporada más.
Con la confirmación oficial de ambos jugadores, el club taronja cierra definitivamente el puesto de alero, que no estuvo al nivel esperado durante grandes compases del pasado año. Con Jankovic, Valencia Basket gana a un jugador de equipo que, sin haber destacado la faceta anotadora como uno de sus fuertes, mantuvo buenos porcentajes desde todas las posiciones durante sus últimas tres temporadas en Panathinaikos, un equipo acostumbrado a la Euroliga.
Aparte de por seguir contando con un jugador veterano, experimentado y entregado al equipo, que aporta el máximo en el día a día y supone un plus en los grandes partidos, la renovación de Sato responde a un punto clave: la necesidad de tener una plantilla de trece jugadores. A falta de fichar un pívot, un refuerzo seguro en la lista de tareas de Chechu Mulero, Valencia Basket cuenta con doce jugadores bajo contrato.
La experiencia ha enseñado a Valencia Basket a preparar la temporada con el máximo fondo posible. El último ejemplar fue hace un año, cuando a una plantilla de doce jugadores se le unía Jon Stefansson como temporero de última hora, para acabar quedándose fijo ante los problemas físicos de Van Rossom. La incógnita sobre el base belga es, por el momento, uno de los motivos por los cuales el club taronja ha decidido hacer una plantilla larga desde el primer día.
Por el momento, las dudas sobre el director de orquesta siguen aumentando, ya que Mulero confirmó en los micrófonos de Cadena Ser Valencia que no se podía asegurar que Van Rossom llegase al 100% al inicio de liga, un dato preocupante para el devenir de la temporada, y que dejaría la dirección de juego carente de la capacidad ofensiva y defensiva que el base aporta.
Mientras el exjugador del CAI afina su puesta a punto, Pedro Martínez podrá contar con una plantilla de doce jugadores, con siete exteriores que podrán paliar su baja, siempre que no se alargue como acabó sucediendo durante la campaña anterior. El último paso, a falta de ver qué sucederá definitivamente con el asunto de Vives, será el fichaje de un pívot de garantías, que supla la importante baja de Justin Hamilton.