La revolución de los secundarios

VALÈNCIA. No sé cómo acabará la cosa. Espero que ganando los tres próximos encuentros de Liga y con el Valencia clasificado para la próxima edición de la Liga Europa. Pese a que la obligación del club es entrar año tras año en Champions, tal y como se han desarrollado los acontecimientos, la segunda división europea es un mal menor. Digo que no sé cómo acabará la cosa porque hay un clima raro y el futuro de Lim está en entredicho. Pero lo que sí que tengo muy claro es que el Valencia ya ha comenzado a escribir las páginas de su nuevo proyecto deportivo 2020-2021. Lo hace gracias a la aparición de futbolistas que han decidido dar un paso adelante cuando peor están las cosas. 

Los últimos partidos del Valencia están siendo reveladores. La renovación de la plantilla, esa revolución necesaria dela que tanto se habla, ha comenzado. Aunque no haya terminado el curso, los partidos ante el Granada y el Valladolid dejan entrever a los jugadores que quieren ganarse un puesto a la hora de confeccionar la nueva plantilla. Han sido futbolistas de los llamados menos habituales, pero con hambre, los que están manteniendo viva la llama europea. Jugadores con ganas de hacerse un nombre en Mestalla y con ilusión de traspasar fronteras, aunque sea para enfrentarse al Dila Gori de Georgia en un torneo menor como es la Liga Europa.

Hablo de jugadores que quieren un mayor protagonismo en un Valencia del futuro, que ahora empieza a forjarse. Si ante el Granada se destaparon Manu Vallejo y Adrián Guerrero, contra el Valladolid levantaron la mano jugadores como Jaume y Kang In Lee. Han sido esos olvidados los que han dado ese paso adelante tan necesario. El gran acierto de Voro radica en enchufar a futbolistas que parecían desactivados, porque apenas disfrutaban de minutos con Celades, y engancharlos para que aporten todo lo que llevan dentro. 

Lo de Kang In es de nota. Pidió que le traspasaran porque apenas jugaba, todo apuntaba a una salida del club, pero Voro le dio esa oportunidad que tanto reclamaba. Kang In hizo lo que tenía que hacer: hablar en el campo. Ala par que Kang In, otro que sigue teniendo ganas de triunfar en Mestalla es Maxi Gómez. Ya se mosqueó con Celades por ser sustituido, y lleva varios partidos pegándose con todos para llevar al equipo a Europa. El uruguayo es compromiso puro. Como lo son Gayà o Carlos Soler, cuyo valencianismo está fuera de toda duda. 

Parece que los Jaume, Kang In, ManuVallejo o Adrián Guerrero, responden al perfil de la revolución deportiva que se antoja de cara al próximo proyecto. Porque, tras la marcha de Garay, desde el club se filtra que Parejo, Gameiro o Rodrigo, pueden estar en la rampa de salida. Como también el resto de centrales. Excepto Gabriel Paulista, muy implicado en el club, de sobra es sabido que el resto no ofrece ninguna garantía. A Diakhaby,el valenciano Víctor García, de Xeraco, le hizo un traje en su debut en Primera. Mangala tampoco está para muchos trotes…

La gran incógnita radica en dos nombres propios de la casa: Ferran Torres y Hugo Guillamón. Ambos han pasado de ser importantes en el equipo a desaparecer de los focos. Me da la sensación que Lim no ha cuidado lo suficiente a ninguno de los dos. Pese a los entorchados de ambos en las categorías inferiores de la selección española, el Valencia nunca les ha protegido como se debe. El hecho de que no se les hubiera renovado cuándo tocaba es la prueba más evidente de esto que contamos. Como lo es el hecho de que en los últimos partidos de Liga ninguno de los dos ocupe las primeras páginas de los periódicos. Me creo a Voro cuando dice que no ha recibido ninguna orden del club sobre la alineación o no de ningún futbolista.Porque, sin duda, el actual es uno de esos momentos en los que el entrenador deja once camisetas en el vestuario y las cogen aquellos que realmente quieren ser titulares. Veremos quién da el paso adelante ante el Leganés.