VALÈNCIA. El regreso a la competición del delantero brasileño Fabrício Santos, que ante el Real Oviedo (0-0) este domingo jugó sus primeros minutos de la temporada, permitirá al entrenador del Levante, Julián Calero, disponer de más opciones en el aspecto ofensivo.
Fabrício sufrió una lesión muscular en el bíceps femoral de la pierna izquierda el pasado 5 de agosto y en el choque ante el Real Oviedo saltó al campo en el minuto 68, en sustitución de José Luis Morales, para poner punto y final a su periodo de baja.
Con apenas tres delanteros puros en la plantilla, Morales, Iván Romero y Espí, la incorporación de Fabrício permitirá a Calero disponer de otras variantes, ya que el brasileño puede actuar tanto en una de las bandas como en la punta de ataque como referencia ofensiva.
Sin embargo, el propio Calero pidió paciencia con la incorporación de Fabrício. “Después de dos meses no podíamos esperar que saliera y fuera un bombazo, hay que pagar un peaje por la inactividad. Fabri va ir poco a poco cogiendo ritmo y progresando”, dijo el entrenador del Levante al acabar el partido.
De hecho, en el cuerpo técnico y médico del Levante no han querido precipitar la vuelta de Fabrício tras la mala experiencia vivida con el brasileño el curso pasado, en el que recayó de una lesión muscular.
El futbolista brasileño, en su primera temporada como levantinista, sufrió durante la campaña 23-24 varias lesiones musculares y su participación se limitó a 26 partidos en Liga, en los que anotó 4 goles.