VALENCIA. "Asumo todas las responsabilidades inherentes al cargo de entrenador. Todo lo que se ha comentado se ha hecho de forma conjunta. Trabajamos todos juntos en busca de la mejora". Esa fue la contestación de Nuno a la pregunta de si no se hacía cargo de las críticas que existían sobre la planificación deportiva del equipo.
Esa respuesta tiene una explicación. Cuando Rufete se marchó del Valencia CF, Nuno esperaba que el club le nombrara el máximo responsable de la parcela deportiva. Es decir, que él fuera oficialmente el nuevo Manager General Deportivo de la entidad valencianista. Ese cargo, con el que aglutinaba todo el poder y recaían sobre su figura las decisiones deportivas.
Sin embargo, Peter Lim no ha creído conveniente dar ese paso. El asiático no ha querido nombrar Manager General Deportivo a Nuno, porque hasta la fecha no ha considerado que hiciera falta ese cargo dentro del club. De hecho, este verano la estructura ha sido la siguiente. El técnico ha expresado sus necesidades y Lim ha fichado con el consejo de su amigo Jorge Mendes.
Es decir, los fichajes en ningún caso los ha decidido en última instancia Nuno. Nuno no tiene última palabra. No decide. Eso siempre lo hacen Lim y Mendes. Es más, Mendes elige a los futbolistas y Lim marca los límites económicos.
Por eso, Nuno, afirmó de manera clara que él es responsable de sus decisiones como técnico, pero tiró balones fuera cuando se le preguntó por la planificación deportiva.