VALÈNCIA. Pocas horas antes de celebrarse la pantomima en la que Meriton ha convertido la asamblea de accionistas dije en el "90 Minuts" que no esperaba nada de una junta que transitaba por el borde de la legalidad (y aún queda por ver si Libertad VCF denuncia para impugnar la misma).
Además de recordarnos constantemente que tienen el 85% de las acciones del club (de poca cosa más pueden presumir), que el asalariado que Peter Lim tiene aquí de presidente iba a hablarnos de su mágico mundo de colores en el que todo es perfecto y los malos son todos aquellos que no les idolatren, era igual de previsible que la ausencia de enlace matrimonial entre el chico y la chica en una peli de las que el antiguo Canal + echaba los viernes por la noche hace años.
Voy incluso más allá, que el presidente aludiera a una información que un servidor firmó en este medio y en Plaza Radio y la tildara de "fake news" es uno de los mayores favores que me han hecho como periodista. Primero porque ya sabemos lo que vale la palabra de Anil Murthy: el ERTE que no iban a hacer, los refuerzos que iban a venir, la rueda de prensa que iba a dar para explicar el despido de Marcelino... La palabra de Murthy tiene el mismo peso que veces aparece Pocoyó en la saga "Too fast, too furious", cero. Es más, que intente desacreditar a la prensa local y nacional alguien que viene de un país que ocupa el lugar 158 (de 180 países) en el informe que cada año realiza Reporteros sin fronteras, sobre la libertad de prensa en el mundo, es todo un espaldarazo a nuestro trabajo. Gracias, Anil.
Dentro de lo previsibles que se han hecho los muchachos de Peter y su intento por disfrazar Mordor en Disneylandia, si que estuve a punto de sufrir un ataque de risa cuando escuché a Murthy hablar de la sensibilidad que tenían que mostrar las instituciones con ellos por el tema de la ATE. Y a cambio ¿Qué ofrecía Meriton? ¿Que ofreció Meriton en sus visitas a Ayuntamiento y Generalitat meses atrás? ¿Un proyecto? ¿Un pen con imágenes? ¿Una carpeta con papeles? Ni un pen, ni un pin... nada.
¿Qué ha hecho Meriton desde entonces, qué señales de vida ha dado? Ninguna. Para pedir ayuda a las instituciones en los países democráticos (en los de verdad, Anil), hay que mostrar una voluntad y Meriton no ha mostrado ninguna. Lo de esta gente se resume en aquella historia (quien sabe si leyenda o no) que contaban del fútbol argentino. Verán, cuentan que hace muchos años (allá por la década de los 50) dos equipos de un campeonato local de aquel país se jugaban en la última jornada el descenso y se enfrentaban entre ellos. Todo o nada, cara y cruz a 90 minutos. El caso es que por aquellos azares de la vida una "mano inocente" decidió que el árbitro con más fama de casero pitara el encuentro (mayor favor no se le podía hacer al equipo local). El día del partido los dos equipos saltaron al campo con la cancha llena, era evidente que ese ambiente iba a influir en el árbitro. Pero también lo hizo en los locales que tras muchos minutos -y aún con la permisiva actitud arbitral en el juego sucio- eran incapaces de deshacer la igualada sin goles. Así que en cada jugada a balón parado se acercaba disimuladamente algún jugador del conjunto local y le imploraba "cobrá penal, referee! Vamos viejo!". Esta cantinela se fue repitiendo una y otra vez durante el tramo final de la primera parte y durante toda la segunda. Cuenta la leyenda que la insistencia llegó a ser de tal magnitud que al final el colegiado explotó y ante la incredulidad de la concurrencia acabó contestando a voz en grito "yo les quiero ayudar. Pero lleguen al área, muchachos. Lleguen al área!!!!!". Así que si van a pedir otra prórroga para la ATE, y a la hora de pedir sensibilidad y comprensión a las instituciones, antes hagan algo, muestren interés. Lleguen al área, muchachos...