batería de partidos, 'presión' por perseguir y esquivar las lesiones

Lo que espera a Valencia CF y Levante UD tras la Dana

13/11/2024 - 

VALÈNCIA. Lo que espera a Valencia CF y Levante UD tras la Dana. Tras un parón en el fútbol valenciano por las graves consecuencias del temporal que ha azotado a varios municipios de la Comunitat Valenciana, el deporte vuelve a ponerse el 'mono' de trabajo para retomar la competición. 

Los internacionales de Valencia CF y Levante UD serán los primeros en dar el 'pistoletazo' de salida esta semana con los compromisos de selecciones, mientras que este sábado serán los granotas los que regresen al Ciutat de València para enfrentarse al Elche CF. El Valencia CF por su parte, tendrá que esperar al 23 de noviembre para regresar a Mestalla y medirse al Real Betis. 

El escenario que viven Valencia CF y Levante UD es atípico por las devastadoras secuelas que ha dejado la Dana en el pueblo valenciano. Tras aplazarse tres partidos, ambos equipos se enfrentan a un contexto diferente que el resto de sus rivales. Para superarlo, Rubén Baraja y Julián Calero tendrán que emplearse a fondo para sacar el máximo rendimiento de sus plantillas a nivel físico y mental. 

Carga de partidos

Para empezar, el primer obstáculo pasa por lidiar por la 'batería' de partidos que espera a Valencia CF y Levante UD hasta final de año. En el caso de los valencianistas, volverán con tres partidos en apenas seis días. Avanzar en la Copa del Rey daría un partido extra entre semana antes de 2025, en Liga tienen cinco partidos por delante y faltan por encajar los encuentros aplazados ante Espanyol y Real Madrid. 

El Levante UD por su parte, no juega desde el pasado 27 de octubre y tendrá que disputar cuatro partidos en apenas doce días. De este modo, y tras casi tres semanas sin jugar, el equipo valenciano retomará la competición el próximo sábado 16 de noviembre ante el Elche en casa. Tres días más tarde visitará al Pontevedra en Copa del Rey. El cuadro de Julián Calero volverá a jugar en LaLiga ante el Racing en Ferrol el 22 de noviembre y recuperará el choque aplazado ante el Málaga de Liga el 27 de noviembre en Valencia. Todavía tiene, sin embargo, pendiente la fecha del choque en Tenerife. En diciembre, si el Levante accediera a la segunda ronda de la Copa del Rey, sólo podría disputarlo entre el 10 y el 12 de ese mes, pues antes de las vacaciones de Navidad habrá jornada intersemanal.

La 'presión' del perseguidor

Por otro lado, el hecho de ser los únicos clubes de Primera y Segunda división con dos partidos aplazados ha provocado que ambos clubes vean alejados sus objetivos. El Valencia CF por su parte, ha visto como clubes como la UD Las Palmas se ha alejado hasta cinco puntos y el Leganés a siete. Aún así, la salvación sigue estando a tres puntos tras los tropiezos de Getafe y Valladolid y no haber jugado contra el RCD Espanyol la pasada jornada. Ahora, la necesidad de ganar para no descolgarse es todavía mayor.

En lo que concierne al Levante UD, no haber jugado contra Málaga y Tenerife le ha sacado de la zona de playoff a Primera división. Los granotas están fuera por un punto y a cuatro del ascenso directo. Los de Calero dependen de sí mismos para regresar a la segunda posición, pero tendrán que jugar con la 'presión' de hacer los deberes a última hora. 

Esquivar las lesiones

Por último, muchos focos del cuerpo técnico estarán puestos en cuidar el estado físico de sus jugadores para evitar lesiones. Tras un periodo de inactividad que no estaba previsto en la preparación física y una sobrecarga de partidos conforme se vuelva al 'verde', el riesgo de problemas musculares aumenta. Además, cabe recordar que algunos futbolistas también están contribuyendo a ayudar en las calles en su tiempo libre, lo que también supone un esfuerzo físico que puede suponer un percance. Algo que ya ha sufrido el valencianista Rubén Iranzo y explicó hace unos días en una entrevista en la cadena SER: "El entrenamiento invisible de los jugadores es muy importante. En este caso, por estas circunstancias no lo estaba haciendo bien. Ni había dormido, ni había comido, ni había bebido... pero por mis ganas entrené al 200% y es lo que llevó a esta lesión".


Noticias relacionadas