Valencia Basket tratará de mantenerse invicto en la competición europea al mismo tiempo que buscará ponerse con dos victorias de ventaja en el grupo frente al Zenit de San Petersburgo en una cancha de máxima dificultad
VALÈNCIA. El Valencia Basket vivirá esta tarde un auténtico duelo por el liderato del grupo C de la Euroliga ante su rival directo, el Zenit de San Petersburgo. El equipo taronja llega a este partido con un balance de tres victorias y ninguna derrota frente a un conjunto ruso, que solo ha perdido contra el Partizan, pisando los talones. Los locales podrían arrebatar provisionalmente la condición de líder a un Valencia Basket que deberá alargar su imbatibilidad para impedirlo.
No se conjugan las mejores condiciones para los de Jaume Ponsarnau en esta jornada europea. La expedición taronja partió el pasado lunes hacia Barcelona, donde hizo noche y no fue hasta ayer por la mañana cuando cogió un vuelo directo hasta San Petersburgo. Tras el partido, el Valencia Basket hará noche en la ciudad rusa y volará mañana a Amsterdam, donde hará escala, para llegar a Valencia ya entrada la noche. El viaje más complicado y cansado de la temporada, que ha impedido que Joan Sastre pudiera regresar con el equipo por la lumbalgia aguda que padece. Tampoco están para este partido Antoine Diot, superando problemas musculares, y Rafa Martínez, en plena rehabilitación de su rodilla derecha.
Lo más positivo para el técnico taronja es que continúa manteniendo a la misma rotación desde hace tres partidos y no se ha sumado ningún jugador más a la enfermería. Con 11 jugadores profesionales y Ion Galarza, del EBA, el Valencia Basket tratará de volver a las victorias tras la derrota del pasado domingo en Liga Endesa frente al Barça por un punta. Una derrota que dejó en evidencia distintas carencias del conjunto valenciano, sobre todo en el rebote y el juego interior, ante un rival de gran calidad y potencia física. Un perfil que también ostenta el Zenit de San Petersburgo.
El equipo ruso recupera para sus filas a la gran estrella y sensación de esta temporada Brandon Jennings, tras superar una lesión. El base fue número 10 del draft de la NBA en 2009 y acumula una gran experiencia en equipos como Milwaukee, Detroit, Orlando, New York y Washington con un promedio de 14,1 puntos, 3 rebotes, 5,7 asistencias y 1,2 robos). En este inicio de campaña europea con el club petersburgués, el americano fue jugador de la jornada 1 después de rozar el triple doble con 20 puntos, 9 rebotes, 8 asistencias y 30 de valoración. El jugador posteriormente se lesionó pero ya ha regresado con el equipo este mismo fin de semana en la derrota del Zenit ante el Astana por 93-91 en el que alcanzó 16 puntos en 23 minutos y alejan cualquier duda de su estado de forma.
Más allá de la estrella, los segundos espadas son recientes conocidos del Valencia Basket de la pasada temporada. El pívot, ex del Barça, Jalen Reynolds está siendo el hombre más constante con 14,7 puntos, 7,7 rebotes y 1,7 robos, junto al exjugador del Gran Canaria Gal Mekel, base que promedia 11,5 puntos y 10 asistencias. El técnico Vasily Karasev no podrá contar con el base Sean Armand ni el interior Andrei Desyatnikov
El club taronja ya conoce sobradamente la dificultad añadida que tendrá jugar en tierras rusas donde lleva un balance de 7-11. Precisamente a este rival ya se enfrentó en la Eurocup de 2009-10 aunque con una denominación diferente y en un pabellón distinto. En 2014, el Zenit se quedó con la plaza en la VTB League y la Eurocup del BC Triumph Lyubertsy Moscow Region, llevándose al equipo a la ciudad de San Petersburgo, y se mantuvo la historia y palmarés del club anterior.
Pese al nivel del rival, la atmósfera de las canchas rusas y todo lo que conlleva el largo desplazamiento, Valencia Basket tratará de mantener unas buenas sensaciones en competición europea que ha sabido mantener pese al mal inicio en Liga Endesa (2-3). Mente fría y corazón caliente.
