El ciclista murciano espera volver a los entrenamientos el próximo lunes para "volver a la normalidad lo antes posible"
VALENCIA. El español Luis León Sánchez (Astana), que sufrió una caída en la contrarreloj de la reciente Vuelta al Algarve, se encuentra "con dolores en todo el cuerpo", aunque celebra el hecho de que no tenga "nada roto".
"Me duele todo el cuerpo, sobre todo las muñecas porque es una caída que no te esperas, y tengo la mandíbula dolorida, rasguños en las rodillas... No tengo nada en las piernas que es lo importante. Por el corte en la barbilla, sangré mucho y parecía que me había roto la cara, la gente se asustó, pensaban que me había hecho algo en la cabeza. Podía haber sido más de lo que fue", ha señalado en declaraciones facilitadas por su equipo.
El ciclista murciano espera volver a los entrenamientos el próximo lunes para "volver a la normalidad lo antes posible".
"Espero entrenar bien y volver a la competición en la París-Niza. Estas dos semanas se trata de trabajar o más bien mantener lo que tenía, descansar, cuidarme, y que el cuerpo se recupere hasta la cita en Francia".
"Luisle" confiesa que en el Algarve empezó a recuperar la confianza que había perdido, con victoria incluida, pero la caída truncó los planes previstos.
"La victoria de etapa al menos me da la tranquilidad de que las cosas se están haciendo bien, te vas a casa con otra perspectiva, con algo positivo. Yo sé que estoy muy bien y la victoria te hace estar más sereno y significa que el trabajo de casa ha sido bueno. Volver a ganar es un paso adelante y siendo además en una fuga", señaló.
El ciclista del Astana explicó que en la crono de Portugal iba con un desarrollo del 56 y con ganas de arriesgar en la última curva para terminar rápido.
"Sabía que no podía ganar porque Cancellara y Martin se salieron, pero con los tiempos hubiese estado ahí, cerca de los primeros, saliendo en buena posición para disputar la general", concluyó.