Lo que viene a continuación es una versión libre y valencianista de aquel tema de Joaquín Sabina 'Más de cien mentiras', buscando respetar la métrica de la canción original...
VALENCIA. Como ayer el señor Lizondo, descubrió alguna de las mantas de la calidez del columnista deportivo, no me he visto en otra que tirar de sentimiento, de música y de vergüenza torera y reflejar, una vez más, los motivos para no cortarse de un tajo las venas. Lo que viene a continuación es una versión libre y valencianista de aquel tema de Joaquín Sabina 'Más de cien mentiras', buscando respetar la métrica de la canción original.
Tenemos memoria, tenemos amigos,
Tenemos los trenes, los coches, los viajes,
Tenemos la duda y la fe del domingo,
Tenemos a Piojos viviendo en altares.
Tenemos urgencias y gente que chilla,
Tenemos silencio, tabaco, razones,
Tenemos la UEFA, tenemos Sevilla,
Tenemos cenizas de revoluciones.
Tenemos las lonas, pasado y presente,
Tenemos costumbres, manías y filias,
Tenemos la boca, tenemos los dientes,
aquel paradón de Pereira en Recopa.
Tenemos las pipas y el bombón helado,
Los pies en el barrio, y el grito en el cielo,
Tenemos palabras, Lloret, The Barraca
Manolo y su bombo que tocan Paquito.
Más de cien palabras, más de cien motivos
Para no cortarse de un tajo las venas,
Más de cien pupilas donde vernos vivos,
Más de cien mentiras que valen la pena.
Tenemos a Paco, criado en potrero,
Tenemos sus goles, bendita insolencia.
Tenemos Gayá, Domenech portero
Herido orgullo de nuestro Valencia.
Tenemos batallas en ondas de radio,
Tenemos la siesta por siempre perdida,
Tenemos debate, tenemos trinchera,
Tenemos el lujo de no pasar lista.
Tenemos escudo que brilla de noche,
Ropa de partido, blanca bandera,
sueños de mayo, guerras de invierno,
estores velletes por la primavera.
Paterna, Mestalla, Tuzón, Casanova
Puchades, Tonico, Mundo delantero.
Nietos de Españeta, yernos de Carboni
Y a un Quique sentado en ese larguero.
Tenemos Parejo, el nuevo muñeco
manera muy nuestra de decir te quiero.
Tenemos Arroyo, Fernando, Solsona,
Carrete y sobrinos de La Faraona.
Tenemos Pablitos, tenemos Cañetes
eléctricos goles de nuestros abuelos.
Tenemos Torino como bar de copas,
Balada muy triste, en la que es de Europa.
Tenemos pelucas, siempre anaranjadas
dolor de tobillo por culpa de Bremen.
Tenemos a Jaime con el abanico,
Laureles de gloria, coronas de espinas.
Tenemos embajadas hasta en Noruega
valenciargentinos como Mario Kempes
Compras de acciones, procesos de venta
y niñas bonitas singapurenses.
Tenemos proyectos que nunca arrancaron,
goles de Mendieta, canción de Planetas,
Arias, Camarasa, Voro, Tendillo.
En el 83, lloros de chiquillo.
Tenemos a Rafa, aquí si es querido
Guajes y Silvas, Puzol y La Pobla,
Eterno respeto para Don Alfredo.
pasión y garganta, recta sin dobla.