A tres días de que comience la competición nacional frente a Unicaja, desgranamos uno a uno cómo llegan los jugadores tras seis partidos de pretemporada con un balance de cinco victorias y seis derrotas
VALÈNCIA. El Valencia Basket de Jaume Ponsarnau dará el pistoletazo de salida oficialmente en Liga Endesa el próximo viernes frente a Unicaja de Málaga. Un equipo que mantiene el bloque de las pasadas temporadas, con nuevas incorporaciones que se han adaptado rápidamente, y con un no tan nuevo entrenador.
Hasta la fecha, el ascenso del de Tárrega a dirigir el banquillo, tras dos años como segundo técnico, está convenciendo. Cinco victorias y seis derrotas en los seis partidos de pretemporada sin duda es una cifra más que aceptable. Si bien es cierto que la derrota en el partido de presentación contra el Joventut en la Fonteta, la antesala al inicio de la competición doméstica, deja unas sensaciones agridulces pero que no empañan el buen trabajo realizado hasta ahora.
Con el objetivo de prevenir otra campaña de lesiones como la que acabó destrozando las pretensiones europeas del Valencia Basket, la entidad taronja no solo ha optado por revolucionar los servicios médicos del club, sino también por confeccionar una plantilla más amplia. El trabajo de la dirección técnica ha sido frenético durante este verano para retener y mantener a los imprescindibles y traer a jugadores que fueran capaces de encajar en el equipo y dieran un salto competitivo a la plantilla.
Los fichajes han sido solo tres, para llegar hasta los 14 jugadores disponibles, y dos de ellos han causado sensación durante esta pretemporada: Mike Tobey y Matt Thomas. A tres días del inicio de la Liga, desgranamos uno a uno cómo llegan los hombres de Ponsarnau.
MATT THOMAS, UN FRANCOTIRADOR GENEROSO
El escolta ha promediado en estos seis partidos una cifra de 13,5 puntos, 3,2 asistencias y 14,5 de valoración en 23 minutos. Venía para sustituir a Erick Green, que llegó a Valencia como la estrella para competir en Euroliga y que no terminó de encajar en el sistema de Vidorreta, y sin duda está ya dando resultado. En este tiempo, Thomas no solo ha demostrado ser un auténtico francotirador desde más allá de la línea de 6,75, sino que además es un hombre que juega en equipo.
El norteamericano ya metió miedo a los rivales del Valencia Basket con su actuación de récord en el concurso de triples de la Supercopa Endesa con 27, 27 y 26 anotados en cada una de las rondas, que le llevó a llevarse el trofeo de campeón. Además, alcanzó los 22 puntos en la victoria contra Gran Canaria. Pero si Matt encaja en el esquema de este Valencia Basket es por la generosidad. Una palabra que repitió varias veces en una entrevista concedida a Plazadeportiva.com y que luego refleja en la pista con ese promedio de 3,2 asistencias.
Un jugador que sin duda va a ser muy importante, sobre todo en este inicio de liga sin Rafa Martínez.
MIKE TOBEY, MIEDO EN LA PINTURA
Valencia Basket dejó marchar a una bestia como Tibor Pleiss para traer a otra que tiene toda la pinta de que será aún mayor. Tobey ha regresado a la Fonteta como un vendaval, tras una incomensurable campaña con el Iberostar Tenerife, con seis partidos a gran nivel: 11,5 puntos, 6,3 rebotes y 14,8 de valoración en 21 minutos.
El equipo taronja pedía a gritos altura en la pintura y el de Monroe no está decepcionando. Sus 2,13 metros le están permitiendo ser el amo de los aros, tanto machacando como reboteando. La mejora del pívot desde que llegara al club en la temporada 16/17 y posteriormente se marchara, permite prever que este jugador todavía no ha alcanzado su techo a sus 23 años de edad.
Tobey supo suplir de maravilla a Dubljevic en los partidos del Circuito Movistar cuando el Montenegrino estaba en su selección y es que contra Manresa llegó a anotar 21 puntos.
LOUIS LABEYRIE, POLIVALENCIA EN EL POSTE BAJO
El francés tampoco se queda mucho más atrás que sus dos compañeros anteriores. Labeyrie ha promediado en estos seis partidos de pretemporada 8 puntos, 5,2 rebotes y 10,5 de valoración en 18 minutos jugados. Aunque sus actuaciones hayan podido ser algo más discretas, el ala-pívot convirtió ante Gran Canaria nada menos que 20 puntos.
Si en algo destaca Labeyrie es su polivalencia en la pintura. Pese a que su posición natural es la de cuatro, Ponsarnau también le probó de cinco por la ausencia de Dubljevic. Un jugador de 2.08 metros con gran agilidad, habilidad para saltar, machacar y con un tiro de tres puntos aceptable.
WILL THOMAS, TRABAJO EN ESTADO PURO
Gran acierto del Valencia Basket al retener a uno de los jugadores más determinantes en pista. Will Thomas siempre aparece cuando más se le necesita. El de Baltimore ha logrado en estos seis partidos de pretemporada una media de 8,5 puntos, 3,7 rebotes y 10,5 de valoración en 21 minutos.
Sin duda fue uno de los héroes de la casi remontada ante el Joventut con un total de 17 puntos, 4 rebotes y 5 asistencias. 13 de esos puntos los anotó en el último cuarto. La mejor noticia es que Will mantiene el nivel de la pasada temporada.
ALBERTO ABALDE, LA POTENCIA DEL EQUIPO
Jugador con gran físico, polivalencia y hambre de puntos. Abalde ya ha demostrado que puede jugar de alero, escolta e incluso de base y dando un buen rendimiento cualquiera que sea su rol. Unas cualidades que le han permitido hacer en 5 partidos de pretemporada (se perdió el primero contra UCAM Murcia por un problema en la espalda): 8,8 puntos, 2,6 rebotes y 10,6 de valoración en 24 minutos. El hombre que Ponsarnau más rato mantiene en pista.
La gran aportación del gallego al equipo es una buena noticia para el técnico, en un momento en el que el juego exterior está mermado por las bajas de Fernando San Emeterio y Rafa Martínez. El margen de mejora de este jugador parece que no tiene límites.
SAM VAN ROSSOM, EL DIRECTOR DE LA ORQUESTA
El belga es el base más en forma que tiene ahora mismo el Valencia Basket. Van Rossom fue el mejor de la recta final de la pasada temporada y ha proseguido en esta línea en los partidos de preparación. El juego del equipo fluye más cuando está el en pista. Ha promediado 6,5 puntos, 3,5 asistencias y 10,5 de valoración en 19 minutos en seis partidos. Aunque habría que tener en cuenta que contra el Joventut únicamente estuvo en pista 2:23 minutos por un golpe en la cadera que le impidió volver a salir a pista.
Una ausencia que se hizo de notar en esa derrota del partido de presentación que Ponsarnau lamentaba en la rueda de prensa posterior por ser el jugador que había llegado "más en forma" de la pasada campaña. Afortunadamente, esa contusión no fue de gravedad.
GUILLEM VIVES, IRREGULAR
Cuando tiene su día es un base excelente pero en esta pretemporada no mostró su capacidad hasta el último partido contra el Joventut cuando anotó 15 puntos, dio 3 asistencias y cogió 5 rebotes (pero sufrió 5 pérdidas de las 18 del equipo). En ocasiones se echa en falta un poco más de aportación de cara al aro y es que pese a esa gran inspiración que tuvo, sus paupérrimos números en los otros cinco partidos dejan sus promedios en 4,6 puntos, 3,2 asistencias y 6 de valoración en 17 minutos.
La realidad es que Vives necesita recuperar sensaciones después de una temporada en la que se operó del tobillo y tuvo problemas casi hasta el final de la misma. Si el físico le respeta seguro que dará un paso adelante para coger el testigo, al mayor nivel posible, al base titular, Sam Van Rossom.
SERGI GARCÍA, EN BUSCA DE SU OPORTUNIDAD
El base de 21 años quiere reivindicarse esta temporada. El año pasado Txus Vidorreta no le dio demasiadas oportunidades al balear que vino a mitad temporada para suplir la baja de Guillem Vives. Pese a la fuerte competencia en el puesto de uno, Ponsarnau ya está dando minutos a Sergi García. En cuatro partidos (el jugador estuvo con la selección en la ventana FIBA) ha promediado 4,5 puntos, 2,5 asistencias y 6 de valoración.
Números correctos para un jugador que está en crecimiento. Todavía le queda tiempo de cocción pero su atrevimiento le irá abriendo poco a poco un hueco en el equipo.
JOAN SASTRE, MUCHO MÁS QUE OFRECER
Los números de esta pretemporada no reflejan la realidad del balear: 6,3 puntos, 1,8 asistencias y 4,75 de valoración en 20 minutos en 4 partidos (el jugador estuvo con la selección en la ventana FIBA). Tuvo su gran día en el estreno contra UCAM Murcia con 14 puntos y posteriormente su aportación fue más discreta.
El jugador tuvo una temporada menos brillante que la 16/17, cuando el Valencia Basket ganó la Liga, pero su enorme calidad le hizo ganarse un puesto entre los doce jugadores de Scariolo tanto en la ventaja FIBA de verano como en la de septiembre. El seleccionador conoce de sobra el potencial de Sastre, que buscará ser más importante en este Valencia Basket.
BOJAN DUBLJEVIC, EL ALMA DEL EQUIPO
Siempre en mi equipo. Bojan Dubljevic, o Dubi, es uno de los pilares del Valencia Basket. El segundo capitán y un valenciano de Montenegro. En este pretemporada ha promediado 8,4 puntos, 4,8 rebotes y 12 valoración en 17 minutos jugados en 4 partidos. Buenos números. Pero donde realmente se salió fue con su selección. En estas ventanas de clasificación para la Copa del Mundo lleva una media de 24 puntos y 8,5 asistencias para hacer 24,5 de valoración por partido.
Dubi llega a este inicio de temporada pisando fuerte después de haberse recuperado de la tendinitis aquílea que arrastró toda la temporada para volver a deslumbrar con sus 'ganchitos' y su presencia en la pintura.
AARON DOORNEKAMP, EN SU LÍNEA
El canadiense con pasaporte holandés, fichaje de Txus Vidorreta, sigue sin convencer demasiado. La pasada temporada no funcionó como cuatro y tampoco despuntaba como tres. En esta pretemporada más de lo mismo. En estos seis partidos ha promediado 6,3 puntos, 3,2 rebotes y 5,3 de valoración por partido.
Parece que Jaume Ponsarnau le está sacando más jugo al canadiense desde la posición de alero pero se le echa en falta más acierto de cara al aro. Poca efectividad que tapa su buen trabajo defensivo.
SAN EMETERIO, TALENTO Y MENTE FRÍA
Las lesiones no dan tregua al jugador, que no ha podido completar una buena pretemporada. Solo pudo participar en el primer y el tercer partido con una media de 4 puntos y 3,5 de valoración en 10 minutos. La pasada campaña se lesionó varias veces y en estos momentos sufre unas molestias en la rodilla izquierda.
El Valencia Basket está teniendo prudencia con él y es que no hay que olvidar que San Emeterio tiene ya 34 años de edad. Esperemos que cuando regrese sea el jugador de siempre, aportando mente fría, experiencia y canastas imposibles cuando el equipo más lo necesita.
ANTOINE DIOT Y RAFA MARTÍNEZ
No podían faltar dos de los hombres más queridos por la afición taronja y que todavía no han podido estrenarse. El debut de Antoine Diot, ya recuperado más de un año después de su lesión de rodilla, está al caer. Jaume Ponsarnau ha asegurado que todavía no se han "atrevido" a sacarle a pista aunque las sensaciones son buenas. El francés acaba de pasar por una contractura. A Rafa Martínez tardaremos un poco más en verle. Las previsiones de su lesión de rodilla son, como pronto, para volver en noviembre. Paciencia para el más veterano del grupo y el capitán, que tiene ya ganas de volver a saltar al parquet de la Fonteta tras firmar su renovación.
JAUME PONSARNAU
Podría considerarse el fichaje más determinante del Valencia Basket. Su ascenso a primer entrenador, tras dos años como segundo, era arriesgado. O no tanto. Conocía a la plantilla a la perfección y los jugadores confían en él. No hay ruptura, sino continuidad. Ha vivido el mejor año y uno de los peores del Valencia Basket. Todos sus hombres hablan maravillas de él.
El técnico ha empezado con buen pie, encajando bien las piezas del puzzle que tenía y las que le han traído, pese a que no pudo brindar al público de la Fonteta con una victoria en el partido de presentación. Por fortuna, el balance global de la pretemporada es positivo y tiene material de sobre para traer éxitos a la Ciudad del Turia.