El tenista español será una de las principales atracciones de la tercera edición del Abierto de Río de Janeiro
VALENCIA. El tenista español Rafael Nadal será una de las principales atracciones de la tercera edición del Abierto de Río de Janeiro, que se disputará entre el 15 y el 21 de febrero próximo, anunciaron hoy los organizadores.
Nadal, séptimo en la clasificación mundial y campeón en 2014 de la primera edición del Abierto de Río, se unió al francés Jo-Wilfried Tsonga entre los tenistas que ya han confirmado participación en el único torneo de nivel ATP 500 de Sudamérica.
Tsonga, 16 en la clasificación de la ATP, eliminó la semana al español en semifinales del Másters 1000 de Shanghái,
"Disputar un ATP 500, en tierra batida y al comienzo de la temporada es muy bueno para mis propósitos", afirmó Nadal, que ha disputado las tres ediciones del Abierto de Río, en un comunicado divulgado por la organización.
El español aseguró que el torneo de Río ha pasado a ser importante en el calendario mundial del tenis, especialmente para él, por haber desarrollado "una relación especial con el público brasileño" y por que siempre ha tenido una buena recepción en la "Cidade Maravilhosa".
El número uno del mundo por 141 semanas y nueve veces campeón en las canchas de tierra batida de Roland Garros se dijo bastante animado con la posibilidad de conquistar su segundo título del Abierto de Río, torneo que integra el circuito mundial masculino ATP 500 y, en femenino, el WTA Internacional.
De las trece ciudades que integran el circuito ATP 500, tan sólo Río de Janeiro, Barcelona y Hamburgo disputan el torneo en tierra batida.
"Es un privilegio contar con Nadal por tercer año consecutivo en nuestro país. Desde que disputó la primera edición él logró una conexión especial con el público brasileño y su regreso confirma la importancia del Abierto de Río en el calendario de los mejores jugadores del mundo", afirmó el director del torneo, Luiz Procopio Carvalho.
En su última edición, en febrero pasado, el Abierto de Río fue conquistado por el también español David Ferrer, que se impuso al italiano Fabio Fognini en la final, y el femenino por la italiana Sara Errani.
En 2015 unas 55.000 personas asistieron a los 92 partidos disputados en ocho días del Abierto de Río por 110 tenistas de 19 países.
El torneo es disputado en un complejo montado todos los años en el Jockey Club Brasileño, que incluye nueve canchas, la central con capacidad para 6.200 espectadores, y en 2016 ofrecerá premios por cerca de 1,5 millones de dólares.