VALÈNCIA. Thierry Ndikumwenayo estaba hundido después de la carrera de 5.000 metros que le dejó fuera de la final del Mundial de Budapest. El atleta que entrena Castellón junto a Pepe Ortuño terminó noveno en unas semifinales en las que se clasificaban los ocho primeros. Ndikumwenayo no pudo salir a por fuera para remontar posiciones en los últimos 300 metros y luego en la recta ya no encontró el hueco para avanzar, con lo que se quedó a un puesto y cuatro décimas de la final.
“Estoy muy decepcionado”, dijo Ndikumwenayo, muy triste tras su actuación en Budapest. “Ha sido una carrera táctica. Iban tirando y parando, pero yo iba muy bien hasta el último 300. Entonces pensaba atacar pero como había seis o siete rivales, me esperé al 200. Cuando iba a atacar, el ugandés que venía por detrás (Oscar Chelimo) me cerró y ya en la recta no pude pasar porque me vi encerrado. Me da mucha rabia porque estaba muy bien”.
El atleta nacido en Burundi ya no competirá más esta temporada y piensa ya en la próxima, el año de los Juegos Olímpicos de París. “Era mi primera Mundial con España y era un momento muy especial. En realidad todo el año ha sido muy especial para mí porque era el primero con España. Me he preparado muy bien, he entrenado muy duro y por todo eso me sabe muy mal no haber podido meterme en la final”.
Tras la actuación de Ndikumwenayo y, anteriormente, Quique Llopis, Fátima Diame y Víctor Ruiz, sólo queda por debutar Carmen Marco, unas de las seis aspirantes a las cuatro plazas del relevo 4x100 de España.