VALÈNCIA. Las cacareadas cuentas que el Valencia presentó esta pasada semana, desvelan que el club no está obligado a vender a ningún futbolista antes del 30 de junio. Algo que, por el contrario, sí que sucedió otras temporadas. Pese a lo que diga Meriton, los números no son como para tirar cohetes. Sin embargo, tampoco hay una urgencia desmedida en cuanto a recaudación se refiere que obligue al traspaso de futbolistas. Y tenemos Fair Play para fichar. No hay excusa. Eso, en otros tiempos, daría cierto aire de tranquilidad a la hinchada. El aficionado estaría relajado porque no habría ninguna venta inesperada de alguno de sus ídolos en diciembre y llegaría algún refuerzo. Pero con Peter Lim a los mandos, nunca se sabe. En Mestalla puede suceder cualquier cosa.
Por desgracia, el valencianismo no afronta el mercado de invierno como una oportunidad sino como una amenaza. Hay cierto temor en el ambiente futbolero. Así de claro. Años ha, el club siempre firmaba algún jugador para reforzar el equipo. Aunque fuera un petardo. Pero fichaba. Algunas veces había suerte en la incorporación invernal y llegaban futbolistas de la talla de Leonardo, Ilie o Coquelin, por citar algunos ejemplos, mientras que en los últimos años se erró el tiro en exceso personificado en las figuras de Ferro, Oliva y Cutrone. Sea como fuere, siempre había novedades entre diciembre y enero. Pero este año, y con las inquietantes noticias que llegan de Inglaterra, todos cruzamos los dedos para que Javi Guerra no se vaya antes de tiempo para que el magnate singapurense pueda pagar el nuevo estadio.
En ausencia de obligaciones, y sin que la alarma de emergencia económica suene en Mestalla, vamos a ver qué pretende Peter Lim con el Valencia. Si es que no lo sabemos ya después de diez años de pesadilla... Si todavía se estima en algo el club, cosa que dudo, la lógica apuntaría a que tendría que hacer caso a Baraja. El entrenador ha pedido que no haya ventas, ¡cuidado que se las ve venir!, además de reforzar el equipo con un jugador de banda derecha, otro para el carril izquierdo y un delantero con gol. Ya veremos si le hacen caso. Me extrañaría. Aquí habría que NO dejar salir antes de entrar...
Creo que es necesario reforzar el equipo con urgencia. Porque la cuesta de enero será dura de verdad. Pero como dudo que a Lim le preocupe mucho si el Valencia queda octavo o decimocuarto, porque es evidente que lo deportivo le importa un rábano, no me extrañaría mucho que estuviera más pendiente de las ofertas que le puedan llegar por la "Quinta del Pipo" que traer a Carlos Vicente, al madridista Peter (que no Lim) o algún mirlo blanco que Mendes nos pueda colocar a última hora.