Al margen de si ha tenido mejor o peor impacto sobre el terreno de juego, lo que sí que esperábamos de él era la figura de un jerarca, de un líder, pero Garay no la ha asumido
VALENCIA. Entre salario y amortización, Garay es hoy el jugador más costoso para el Valencia. La salida de Negredo le ha dejado en la pole position y el club estudia la idea de venderlo al Spartak. Ese cuantioso coste no es proporcional al rendimiento ofrecido sobre el terreno de juego. De entrada, se ha perdido 11 partidos de Liga, y esta misma pretemporada, 4 de los 6 amistosos que se han disputado. Pero al margen de los problemas físicos, Garay se ha limitado a cumplir. No ha cometido errores groseros como Abdennour o Santos, salvo en el Camp Nou, pero tampoco ha sido ese jugador diferencial que esperábamos tras una transacción de 24 millones de euros. Hay muchos futbolistas capaces de ofrecer lo mismo que Garay la campaña pasada a un coste muy inferior.
La temporada 16/17 no ha sido fácil para ningún defensa. 65 goles encajados son muchos y así es muy complicado destacar. Sin embargo, al margen de si ha tenido mejor o peor impacto sobre el terreno de juego, lo que sí que esperábamos de él era la figura de un jerarca, de un líder, pero Garay no la ha asumido. Esperábamos el temperamento de los defensas argentinos, agresividad, liderazgo y más teniendo en cuenta su dilatada experiencia y lo joven que era la plantilla, pero por extraño que parezca, no se ha atisbado nada de ello. Hasta Mangala, que vino para solo una temporada y que tácticamente es peor futbolista que el argentino, demostró más implicación y más capacidad de mando.
Por todo ello, no lloraré una venta de Garay. No creo que nadie pierda el norte si se va. El problema es cómo dejaría la plantilla. En el centro de la zaga quedarían dos centrales que tenían y tienen posibilidades de salir, como son Vezo y Abdennour, y un canterano, que hace dos campañas estaba en el Juvenil. Aun teniendo en cuenta que el fichaje de Murillo está hecho, todavía quedarían dos centrales por firmar. Con lo que le está costando al Valencia hacer incorporaciones, ¿son capaces de traer un par de centrales de garantías en 20 días? Si es así, adelante con la venta de Garay, pero entiendo que no sea una tarea fácil.
Hay varias opciones. El retorno de Mangala sería uno de ellos; jugador que estuvo a gusto aquí, que no cuenta para Guardiola y que sigue en el City. Marcano es otra de las opciones. Acaba contrato en 2018, aunque el problema será acudir al club que dirige Pinto Da Costa con las arcas llenas y la urgencia de fichar. Otro de los nombres es el de Gabriel Paulista, que ha tenido un rendimiento irregular en la Premier League, pero que estuvo excelso a las órdenes de Marcelino en el Villarreal. Y por supuesto, lo que todos estamos esperando es un fichaje de la secretaría técnica. Seguro que son capaces de sacarse de la manga un defensa, poco conocido, pero que pueda dar un buen rendimiento a un precio asequible para el Valencia. A ver cómo resuelven este puzzle.