Noche grande en la Fonteta para abrir los cuartos de la Eurocup

VALÈNCIA. Poca duda cabe de que Valencia Basket afronta hoy la cita más trascendental que ha podido tener hasta la fecha esta temporada. Mucho más que los cuartos de final de la Copa del Rey que se perdió ante el Barça. El partido de hoy ante el Rytas Vilnius en los cuartos de la Eurocup puede marcar el devenir de los objetivos de la campaña del equipo taronja. 

Un triunfo hoy supondría tener un pie en las semifinales de la competición continental, con la posibilidad de poner los dos ganando el próximo viernes en Lituania o, en caso de perder ese segundo encuentro, tener una última bala en la Fonteta. Una derrota significaría viajar a casa del Rytas con el agua al cuello con la necesidad de empatar la eliminatoria en 'campo enemigo'. La primera opción suena mucho más segura.

En esta contienda Valencia Basket necesita a la Fonteta. Pero no una Fonteta cualquiera, sino la de las grandes ocasiones. Aquel pabellón taronja que en la Eurocup de 2016 llegó en volandas al equipo y fue un auténtico infierno para cualquier rival, pese a que fuera doblegada en la final. Haber llegado hasta ese momento fue, sin ninguna duda, buena culpa de la Fonteta. Ese es el ambiente que necesita Ponsarnau y su séquito para salir vivos del primer asalto europeo.

El técnico tiene buenas noticias en el parte médico de la semana. Después de que Alberto Abalde y Bojan Dubljevic volvieran lesionados de la ventana FIBA, el gallego vuelve a estar disponible y el montenegrino es duda hasta el último momento. El hematoma a nivel de la articulación sacro-ilíaca izquierda que sufre no ha evolucionado tan bien como los servicios médicos esperaban, pero tampoco se descarta su posible participación en un partido tan importante. En caso de que solo Abalde volviese a la convocatoria, Sergi García sería probablemente el descarte. Si también Dubljevic lo hiciera, Ponsarnau tendría que dejar fuera a un exterior más. 

Lo cierto es que en Eurocup, hay pocos equipos que hayan podido toser al Valencia Basket. Una racha de diez triunfos seguidos y una Fonteta que ha sido defendida en los ocho partidos que ha jugado el equipo hasta el momento en esta edición de la competición avalan al que es el mejor equipo de la Eurocup de los ocho que quedan vivos. Además, Valencia Basket se convertirá hoy en el primer equipo que alcanza los 200 partidos jugados en esta competición.

Pese a todo, el Rytas Vilnius no es, ni mucho menos, un rival menor. Además, llega en un estado de forma inmejorable. Los lituanos llegan con ocho victorias seguidas y habiendo derrotado al Zalgiris Kaunas de Euroliga en la final de la Copa lituana. Uno de los principales culpables del nivel de juego y resultados que está ofreciendo el Rytas es Artsiom Parakhouski, pívot que llegó al conjunto visitante para el Top16 de la Eurocup. El interior bielorruso no es la única arma con la que cuenta Dainius Adomaitis. Rok Stipcevic y Chris Kramer lideran desde el juego exterior a una plantilla de lo más completa. La única baja que tienen es la del lesionado de larga duración Evaldas Kairys.

Con este arsenal, el Rytas Vilnius tratará de conseguir su primera victoria contra el Valencia Basket fuera de sus fronteras. El único triunfo conseguidos en los tres precedentes que existen sirvió para eliminar a los taronja en las semifinales de la ULEB Cup 2004-05. Esta noche, los lituanos tratarán de robar el factor campo a los taronja para encarrilar los cuartos de final para su terreno. La Fonteta no debe permitirlo.