VALÈNCIA. Un Levante de chistera y varita. La magia de Montiel y De Frutos fue una de las cosas que salvó al equipo y le hizo marcharse al descanso con tablas. La asistencia del centrocampista -se llevó de Ibiza sus dos primeras asistencias del curso- habilitó al segoviano para la obra de arte que puso el empate. Después, el madrileño puso un centro con música para que lo rematara un gran Bouldini durante todo el encuentro. En cómputo global, el Levante de Calleja empezó a navegar con muy mal pie pero supo dar el giro de timón necesario para no hundirse y salir con la barca a flote. Estas son las notas de PlazaDeportiva.com tras el Ibiza - Levante:
Cárdenas (6): Bien. Tuvo alguna salida con dudas, como una en el segundo tiempo que pudo costar cara, pero volvió a estar sobrio en el segundo tiempo.
Son (4): Agujero. Sufrió demasiado a la espalda y le costó horres sostener al equipo por la derecha. Fue la banda que trató de explotar el Ibiza: por la que llegó el primer gol y por la que salió la jugada de un segundo que pudo anotar Coke, invalidado finalmente por fuera de juego. Fue un gran agujero.
Postigo (6): Serio. Sobre todo en la segunda parte, el capitán creció y rindió bien. Algo superado en la mala primera hora de juego.
Vezo (7): Notable... otra vez. Sigue a un gran nivel y la peor noticia es que no podrá estar la próxima jornada tras ver la quinta amarilla en Ibiza. Perfecto al corte, rápido y expeditivo. Mejor en el segundo tiempo.
Álex Muñoz (7): Imperial. Sigue cuesta arriba. Esta vez en el lateral zurdo y no en el eje centrales, cuajó un gran partido. Como la línea general del equipo, creciendo en el segundo tiempo.
Pepelu (6,5): Mejoró junto a Iborra. La entrada del moncadense hizo mejorar a un Pepelu perdido en los peores minutos del Levante. En el segundo acto, cogió oxígeno y se complementó con Iborra de una forma seguramente nunca vista desde que el hijo pródigo regresó a casa.
Pablo Martínez (4): Expulsión. Aunque admite debate, Pablo se llevó un tobillo por delante en una entrada abajo, a destiempo, pero en disputa de la pelota y en posición lateral. Guzmán Mansilla pudo resolverlo con amarilla aunque la acción es especialmente dura. Más allá de la cartulina, sin el nivel mostrado en el paso de Miñambres por el banco. Será baja importante la próxima semana.
De Frutos (7): Con la chistera. El segoviano hizo magia para colocar el empate al descanso, en la última jugada del primer tiempo. Ya había avisado incluso al incio del encuentro. Su conexión con Montiel hizo daño al Ibiza. Primer gol con el Levante esta temporada.
Brugui (-): El sacrificado. Fue sustituido por Iborra cuando Pablo Martínez fue expulsado. La idea de Calleja fue colocar tres hombres en el centro del campo con Bouldini por delante y De Frutos en banda para rehacer al equipo tras la roja. Antes, el de Bàscara había aparecido poco.
Montiel (7,5): Otro con la varita. Gran culpa del crecimiento del Levante con diez la tuvo el '20'. No solo en su conexión con De Frutos, sino con acciones como la del tanto de Bouldini. Un centro medido, templado, con melodía celestial para que el marroquí pusiese la cabeza. Asistencia de sus botas en los dos tantos. Las llaves del juego del Levante de Calleja están en el bolsillo de Joni Montiel.
Bouldini (7): Portentoso. De nuevo importante en muchas facetas del juego. Presión, trabajo... y gol. Hizo su segundo tanto con la camiseta del Levante, en dos partidos consecutivos, y con un remate certero, picado abajo, aprovechando la golosina de Montiel.
Iborra (7): "El mejor del partido". Así lo declaró Javi Calleja en su comparecencia post-partido. Dio poso al equipo, oxígeno, mejoró a Pepelu y equilibró el centro del campo en un momento de vacas flacas durante el partido. La experiencia del moncadense también dio al Levante una personalidad clave en la recta final del encuentro, con protestas al colegiado y un juego mental más allá del balón.
Soldado (5): Poco. Calleja explicó la intención con la inclusión de Soldado por Bouldini, pero no surtió efecto. Muy poco del valenciano sobre el césped.
Cantero (5): Velocidad. Es lo que trató de encontrar el técnico con el madrileño. De hecho, sí que dio con la fórmula pero entró poco en contacto con la pelota. Trabajo seguro.
Franquesa (-): Bien. La entrada del catalán fue demasiado tardía como para colocarle una valoración concreta. Sin embargo, estuvo intenso en los minutos que jugó y dio oxígeno en banda.