VALENCIA. La Real Sociedad y el Real Betis dirimen el domingo un duelo entre equipos con rachas radicalmente opuestas, con los donostiarras obligados a quebrar su serie de cuatro derrotas consecutivas -tres en LaLiga y la última en Europa- ante un rival crecido, que busca su cuarto triunfo seguido.
Por lo tanto, el conjunto de Eusebio Sacristán afronta la visita a Anoeta del equipo sevillano con la obligación de ganar para no entrar ya claramente en su primera crisis de la temporada.
El conjunto donostiarra salva los muebles porque ganó los tres primeros partidos, lo que le permite estar en una zona cómoda de la clasificación pero otra derrota, que supondría su peor racha desde el ascenso en 2010, pondría de los nervios a una afición local desconcertada por la irregularidad de los blanquiazules.
El balance como local en este inicio de Liga no es bueno para la Real, con dos derrotas en tres partidos en Anoeta, y el juego sigue sin ser convincente salvo chispazos aislados producto de la calidad que atesoran los vascos en el medio campo y adelante.
La Real no solo ha perdido los últimos encuentros, sino que además ha mostrado unos problemas en defensa preocupantes y ha encajado nueve goles en 270 minutos de juego, algo que parece incompatible con el triunfo.
Eusebio Sacristán introducirá cambios con respecto al equipo que cayó 3-1 en San Petersburgo ante el Zenit porque, sobre todo su medio campo, comienza a dar muestras de cansancio y Asier Illarramendi, Juanmi y Willian José, suplentes en Rusia, podrían estar en el once titular.
El Betis de Quique Setién, quinto con 12 puntos después de un magnífico inicio liguero, acude con la moral por las nubes tras haber encadenado tres victorias, haber plasmado sobre el verde la idea irrenunciable de juego del entrenador e ilusionado a una afición tras años de decepciones y proyectos fallidos.
El técnico cántabro va a San Sebastián con los mismos mimbres de la goleada al Levante (4-0) y con la recuperación del mediapunta colombiano Juanjo Narváez, tras superar una lesión de tobillo, por lo que se presume que puede dar continuidad a la casi totalidad del once que bordó el fútbol en la segunda parte ante los levantinistas.
Setién sigue con las bajas por lesión del medio Víctor Camarasa y del mediapunta argelino Ryad Boudebouz, además del defensa rumano Tosca y del extremo costarricense Campbell, que deben coger la forma física tras superar sus dolencias.
En cuanto al once, el preparador verdiblanco ha dejado la puerta abierta a la posibilidad de algún cambio al precisar que "las quinielas por las alineaciones van a ser complicadas".
Los retoques podrían ser mínimos en su clásico 4-1-4-1, con Javi García de mediocentro y la opción de que el único delantero se convierta en dos con Sergio León y el paraguayo Tonny Sanabria.
Sí parece segura la continuidad del canterano Fabián Ruiz en el medio campo por el doble motivo de su excelso estado de forma y de la baja de Camarasa; mientras que otros de sus puntales -el mexicano Andrés Guardado y el capitán Joaquín Sánchez-, como ya sucedió hace dos jornadas en el Bernabéu, podrían entrar en posibles rotaciones.
Lo que sí es innegociable para Setién y sus jugadores es la idea de tocar desde atrás, desde el portero, para lo que será básico salir de la presión alta a la que los donostiarras, como viene sucediendo hasta ahora, someterán a los verdiblancos.
Alineacones probables:
Real Sociedad: Rulli; Odriozola, Llorente, Elustondo, Kevin; Illarramendi, Zurutuza, Prieto; Juanmi, Oyarzabal y Willian José.
Betis: Adán; Barragán, Mandi, Feddal, Durmisi; Javi García; Joaquín, Guardado, Fabián, Tello o Sergio León; y Sanabria.
Árbitro: Alfonso Álvarez Izquierdo (Comité Catalán).
Estadio: Anoeta.
Hora: 12:00