VALÈNCIA. Queridos Reyes Magos,
Les escribo desde Valencia algo mosqueado con los regalos que he recibido este año. No me habéis traído nada de lo que les pedí el año pasado -ya que me he levantado pronto y solo he visto unos calcetines y un batin-, me he propuesto escribirles la carta hoy día 6 de enero para que a ustedes, sus Majestades Reales –SS.MM-, la lean lo antes posible, ser de los primeros y les dé tiempo a traerme o concederme alguno.
En primer lugar quiero que el Valencia CF gane partidos. Sí, sé que empiezo fuerte y que es complicado pero estoy convencido de que, con su magia, son capaces de todo. No sé si me expresé bien el año pasado cuando dije que “no quería perder partidos” porque lo único que hicimos fue empatar. No quiero ser el “Empatencia”. Además, el año pasado debí portarme peor que el anterior porque el Valencia CF apenas ganó una docena de partidos frente a la treintena del año natural pasado. Son números de desastre y, por eso, quiero pedirles que nos den una alegría a todos los valencianistas y nos traigan ese regalo en forma de victoria lo más asiduamente posible.
Quiero un portero que pare; una defensa que defienda; un centro del campo que distribuya; y una delantera que marque goles. Vale, ya sé que me estoy pasando con las exigencias, pero estoy seguro de que me entendéis. Necesito un guardameta que aporte seguridad y reflejos pero que también esté loco y lidere desde atrás. No sé si lo tenemos en el equipo o si hay que buscarlo fuera, pero lo quiero defendiendo la portería del Valencia CF ya, porque ahora no lo veo. Tampoco veo una defensa de garantías solvente ya que la pareja de centrales y el lateral derecho cambia más de nombre que la discoteca Jardines: Llampúa, Betty Pop, Jardines otra vez, Supercor (bueno vale que éste estaba al lado pero algunos entraban con más fiesta encima ahí que al local de al lado). Por cierto, ahora creo que es una Universidad, aunque algunos ya impartimos alguna cátedra allí. También un centro del campo que no depende del estado físico de un futbolista y sea capaz de ofrecer un recambio de garantías; así como una delantera que marque goles de verdad, y no dependa de la rodilla de un futbolista que creo que va a tardar bien poco en salir.
Quiero un entrenador al que le duelan las derrotas y celebre como un loco las victorias. No sé si está dentro o fuera del club, pero quiero uno que pelee todo como si le fuera la vida en ello y no uno que le dé exactamente igual si subimos o bajamos; si ganamos o perdemos; si se queda o se va.
Quiero fichajes. Sí, sé que pido cosas imposibles y que están únicamente al alcance de ustedes, pero necesito que incorporen a alguien. Es que el año pasado lo pedí y solo me trajeron a Florenzi y con mucha desgana. Pero no quiero fichajes de Aliexpress, que parecen una cosa y luego son otra bien distinta. Ni tampoco fichajes de bulto, para completar la plantilla y cumplir expediente. Quiero jugadores que no saquen de esta situación independientemente de su calidad, experiencia o edad.
Quiero también que la prensa sea veraz, solvente y esté lo más unida posible. Bueno, pensándolo bien olviden esto, porque es imposible realizar algo así y suficiente con que tenemos trabajo unos pocos en esta ciudad. Traigan jefes competentes, puestos para la gente que esté desocupada y herramientas para poder funcionar; de esta forma seguro que la cosa mejora en calidad y cercanía. Oportunidades y medios, eso es lo que necesita esta ciudad.
Quiero que la afición no se pelee. Esta es quizás de las más importantes y una de las más complicadas –sin ironía alguna-. Me duele en el alma ver cómo valencianistas de puro sentimiento se reprochan y señalan en redes sociales únicamente por no pensar igual o, lo más curioso, pensando lo mismo al no tener la misma forma de actuar. Si la afición pudiera elegir, estoy seguro que el 100% preferiríamos que el club no fuera de Meriton y que fuera de los valencianos; pero es doloroso ver como si no haces lo que unos pocos exigen, estás en el bando contrario. Todos quieren el bien del Valencia CF y si únicamente van a hacer daño o esperar que el equipo caiga insultar o faltar el respeto, no sé si son buenos o malos valencianistas pero seguro que son malas personas (además de niños rata a los que seguro ustedes no les llevan ni carbón porque se lo comen a pedazos).
Quiero un campo nuevo. No un medio campo, sino un campo entero. Tampoco quiero un proyecto, ni planos, ni permisos… ¡quiero el campo! Es como cuando pedía un coche Ferrari escala coleccionista y me regalaban los fascículos de Planeta de Agostini para que, con suerte y mucho dinero, lo construyera en dos o tres años que duraba la colección –si es que la acababan y no te dejaban a medio coche-. Vivo cerca del Nuevo viejo Nuevo Mestalla y me gustaría que ya no tuviera más renombres. Quiero que se aclare lo de la ATE, los permisos y todas las movidas varias que tiene este impredecible y complicado club así como que, de una vez por todas, ustedes lo hagan posible. Hagan magia (aunque tengan que llamarlo Baltasar Stadium).
Quiero que Anil Murthy deje de ser presidente del Valencia CF. Bueno, presidente, director deportivo, director de relaciones y lo que sea que tenga que ver con un cargo directo de responsabilidad ejecutiva. Si quiere quedarse en un puesto honorífico entregando ninots o placas conmemorativas me parece bien siempre y cuando deje hacer a los que saben y no se meta en cosas realmente importantes. Por supuesto, en ello va intrínseco no hablar públicamente. Pero sé que SS.MM de Oriente son inteligentes y saben de lo que hablo.
Quiero empresarios valencianos que pongan pasta y, al menos, hagan la oposición al club. Ya que ustedes manejan materia prima como oro, incienso y mirra, a ver si conocen a alguien que quiera invertir en Valencia y pueden ponerles en contacto con la sociedad civil valenciana. Aquí en Valencia hay buenas intenciones –en su mayoría-, pero no tienen ni uno. Y como no tienen dinero poco pueden hacer a día de hoy.
Quiero que Peter Lim venda el club. Pero no lo digo con ninguna falta de respeto a Lim ni a ustedes, sus majestades, que seguro que se llevan bien con él por aquello de que los que tienen pasta se conocen todos. Quiero que lo venda porque está claro que no le pone las ganas ni el interés que se merece una entidad de 101 años. Con muchas decisiones que ha tomado se ha demostrado que no es lo que necesita la entidad y que hace falta un cambio. Por ello, si lo puede vender a gente que tenga idea de fútbol pues mejor que mejor. Nada de aviones de oro ni fondos buitres, que a ver si va a ser peor el remedio que la enfermedad. Ustedes tienen una terrible tarea con esto por delante por eso les doy casi un año de margen para que lo hagan posible.
Y por último, quiero la Playstation 5, que me he levantado y no la he visto. Sé que está mega agotada pero pensé que ustedes tenían stock allá en el Oriente Medio. Bueno, para ser justos he visto un calefactor blanco, cosa que se parece y ni tan siquiera era para mí. Me ha pasado como cuando pedí la Super Nintendo y me trajeron la NASA –que era la versión pirata de la NES vendida en España como churros-. Una consola que llevaba un cartucho con 10.000 juegos insertados dentro, donde eran 10 pero multiplicados por 1000 versiones distintas.
Así que SS.MM tienen mucho tiempo por delante para intentar cumplir alguno de mis deseos para este año 2021. Confío en ustedes más que el propio organigrama gestor del club. Acuérdense de la Playstation 5 también.
De corazón y con mucha salud.