El asiático no puede seguir dirigiendo el club desde Singapur y no dotar a la sociedad de una estructura seria, profesional y con potestad para tomar decisiones en sus áreas sin tener que consultarlo todo. La broma ya está bien
VALENCIA. El Valencia CF lo hace todo al revés. Lo he escrito y dicho muchas veces esta temporada pero cada vez que se empeñan en hacer las cosas con menos sentido. La destitución de Gary Neville llega tarde, muy tarde, y se hace en el momento más erróneo posible. Después de haber tenido 15 días sin fútbol y con la posibilidad de haber lanzado un mensaje claro al entorno de la importancia que tiene que ahora mismo todo el mundo centre sus esfuerzos en no descender han preferido dejar que se hable todos estos días del parón del banquillo y de lo malo que era el inglés. Todavía no lo entiendo.
La coletilla de que los asiáticos tienen sus tiempos y que van a otro ritmo no vale. Los asiáticos ya llevan en España dos años y están obligados a empezar a adecuarse a los tiempos del Valencia CF, del fútbol y de su afición. Ya no es una posibilidad, es una obligación como máximos accionistas. El circo en el que han convertido el Valencia CF no es digno. Una cosa es equivocarse y otra bien distinta es no tomar una buena decisión ni por equivocación.
Lo de esta temporada no tiene justificación posible y espero que sirva para que Lim le de poderes por fin al director deportivo que contrató en enero. Es momento de centrar los esfuerzos en salvar al equipo y que se mantenga un año más en primera división. A partir de ese momento, Peter Lim está obligado a venir a Valencia y a explicar que quiere hacer con el club de Mestalla. No sirve mensajes vacíos de la presidenta, debe ser él.
El asiático no puede seguir dirigiendo el club desde Singapur y no dotar a la sociedad de una estructura seria, profesional y con potestad para tomar decisiones en sus áreas sin tener que consultarlo todo. La broma ya está bien. La temporada que se ha comido el valencianismo, y esperemos que no vaya a peor, no tiene justificación posible y no es fruto de la casualidad. Lo que está ocurriendo es el síntoma del desastre que hay en las oficinas, donde nadie manda ni ordena. Y la que ordena, la presidenta, es una inexperta en este mundillo a la que el traje le va muy grande.
Después de tirar a Neville, Lim no tiene alternativas. Su proyecto sólo volverá a tener credibilidad si apuesta por un entrenador de nivel y no por un experimento que haya dirigido a varios equipuchos pero sea amigo de Mendes, y dejar a Suso García Pitarch limpiar a los paquetes que el luso ha colocado en Mestalla con sigilo además de traer a los que él y el entrenador consideren oportuno para darle la vuelta a la película.
Lim ha pagado por la mayoria accionarial, pero eso no le da la potestad para hacer lo que le de la gana. No. Ese es un error de concepto que me da la sensación que tiene el asiático. Piensa que por comprar las acciones puede hacer experimentos con el club de Mestalla como si esto fuera un juego y no lo es. El tiempo de los aprendices y comentaristas se acabó. El tiempo de los fichajes de futuros cracks por encima de su precio, y todos de su amigo Mendes, se acabó. Es hora de cambiar el rumbo y demostrar que quiere un buen Valencia CF. Lo que ha quedado claro es que sus amigos, Mendes, Valdir, Camacho, Carneiro, Nuno, etc, no le han hecho seguir teniendo el aplauso de Mestalla. De usted depende que la gente vuelva a confiar o que le echen como ya echaron a Roig, Soler y Llorente.