VALÈNCIA. (EFE).- El jugador castellonense de vóley playa, Pablo Herrera, ha decidido a sus 39 años seguir en la élite y afrontar el ciclo olímpico para intentar llegar a los Juegos de París 2024 junto a su compañero, el gaditano de 34 años Adrián Gavira, un objetivo que ambos ven “factible”.
“Si hemos decidido intentar llegar a París 2024, es porque lo vemos factible. Si no creyésemos en nuestras posibilidades, lo habríamos descartado. No tendría sentido embarcarnos en esta dura aventura si no pensáramos que puede tener un final feliz”, afirmó Herrera en declaraciones al Proyecto FER.
En gran medida, esta apuesta por la continuidad responde a la gran compenetración con su compañero Gavira. “Llevamos casi catorce años juntos, con todo lo que ello supone. Pero la relación es magnífica. Pese a toda la tensión y la exigencia por el máximo nivel, no hay el menor síntoma de desgaste. Más que compañeros, somos casi hermanos”, comentó.
Si logra clasificarse para París 2024, Herrera se convertiría en el primer jugador de vóley playa en alcanzar seis participaciones olímpicas, una posibilidad que representa un “aliciente y una motivación adicional” a la hora de afrontar el proceso clasificatorio.
Pero el deportista FER no retomará plenamente la actividad hasta que no se recupere de la operación en la rodilla derecha a la que va a someterse en breve.
“La competición tardará todavía en reaparecer. Por tanto, es el momento ideal de pasar por el “taller”. No es por una dolencia grave, pero necesito pasar por el quirófano para afrontar el ciclo olímpico con plenas garantías”, reflexionó.
Herrera expresó que “estos Juegos han sido muy reconfortantes. Obviamente, ninguno como los de Atenas, cuando acabé segundo con Javier Bosma. Pero, del resto, diría que nuestras prestaciones han sido mucho mejores aunque hemos repetido la novena plaza alcanzada en Pekín 2008, Londres 2012 y Río 2026”.
“Hemos jugado a un nivel altísimo. Hubo derrotas que, perfectamente, podían haber sido victorias. Es decir, hemos demostrado que seguimos siendo competitivos. Por qué no darnos una nueva oportunidad”, añadió.
Sobre la clasificación, el castellonense señaló que no será fácil, “primero, por nosotros mismos, porque ya no somos dos chavales y la edad no perdona y porque la Federación Internacional quiere reducir al máximo la participación en los torneos del circuito mundial”.
“Si se confirman estas intenciones, la clasificación olímpica vía ránking se endurecería muy seriamente. Vamos a esperar novedades, pero si restan participación en los torneos de 4 y 5 estrellas, a nosotros nos perjudican”, explicó el integrante del Proyecto FER.
Por último, Herrera afirmó que le gustaría que su familia le viera jugar en directo en unos Juegos, ya que no fue posible ni en Río ni en Tokio, pero París está muy cerca.
“Si se desarrollan con normalidad, seguro que mi mujer y mis hijos, otros familiares y más amigos viajarían para verme. Este sí sería el colofón perfecto a mi carrera. Casi más que el récord de participaciones olímpicas”, finalizó.