El entrenador aseguró que si son capaces de ganar al Sevilla lograrían la permanencia en Primera división "al 99,9 por ciento" y recordó que espera un rival "herido y más peligroso" tras su contundente derrota en la final de la Copa del Rey
VALÈNCIA. El entrenador del Levante, Paco López, aseguró este jueves que si son capaces de ganar al Sevilla lograrían la permanencia en Primera división "al 99,9 por ciento" y recordó que espera un rival "herido y más peligroso" tras su contundente derrota en la final de la Copa del Rey.
"Las matemáticas no estarían pero hay que ser realistas, aunque no va a ser fácil", dijo Paco López en la rueda de prensa posterior al entrenamiento del equipo.
Si el Levante gana al Sevilla alcanzaría una ventaja de doce puntos respecto al Deportivo de la Coruña, que este domingo recibe al Barcelona y que para salvarse tendría que ganar sus cuatro partidos y, además, darle la vuelta a una desventaja de dieciséis goles con el Levante en la diferencia de goles general.
El entrenador valenciano explicó que espera la mejor versión del Sevilla y recordó que todavía tienen opciones de clasificarse para la Liga Europa.
"Espero el mejor Sevilla porque tiene una calidad inmensa, con jugadores de máximo nivel y porque viene herido, y un rival así herido se convierte en más peligroso. Es una oportunidad que se les presenta de tener opciones para estar en Europa y me espero el mejor rival posible, un Sevilla difícil de vencer, aunque nosotros competimos de tú a tú con cualquier rival", declaró.
Paco López no quiso descartar todavía al Deportivo en la lucha por la permanencia. "El fútbol es fútbol y se han dado situaciones que parecían milagrosas y todo el mundo es capaz de cualquier cosa, pero nosotros dependemos de nosotros mismos y no tenemos que mirar a nuestros rivales", adelantó.
Además, el preparador del Levante esquivó las preguntas sobre su futuro y explicó que debe estar centrado en certificar de forma matemática la permanencia en Primera División.
"Os entiendo perfectamente y que sea de interés todo esto, pero hasta que no se cierre matemáticamente la permanencia del equipo no puedo ni debo distraerme con nada. Cuando el equipo esté salvado, y ojalá sea cuanto antes, entenderé mejor que podamos hablar de futuro", explicó el técnico del Levante.
"Estoy disfrutando, disfruto mucho de mi profesión y si encima las cosas van bien, mejor. Intento vivir el día a día y quiero que esto acabe de la mejor manera como el equipo merece. A nivel personal lo dejo en un segunda plano", añadió.
El preparador valenciano reconoció que el equipo está cansado tras haber jugado dos partidos en apenas cuatro días y volver a jugar el viernes.
"Venimos de jugar jueves, lunes y ahora viernes y el esfuerzo es fantástico. Nos queda un penúltimo esfuerzo, aunque estemos cansados pero el equipo tira de orgullo y hasta que no se consiga el objetivo se van a dejar hasta la última gota de sudor", remarcó.