Baloncesto

El futuro europeo de Valencia Basket sigue en el aire

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VALÈNCIA. Valencia Basket sigue sin definir cuál será su camino en Europa la próxima temporada. Y no es una decisión menor. El curso que viene marcará el inicio de una nueva etapa con el traslado al esperado Roig Arena, un momento que debería ir acompañado de una competición a la altura. En cambio, el panorama actual deja muchas dudas acerca de cuál es el camino correcto.

La Euroliga cambia las reglas del juego y subasta sus licencias

Todo apuntaba a que la Euroliga sería el escenario ideal, pero las condiciones han cambiado de forma drástica. La organización ha dejado de ofrecer invitaciones y ha puesto en el mercado licencias trianuales por dos millones de euros por temporada. Una cifra que ha generado rechazo generalizado entre los clubes interesados, y que ha provocado un auténtico ‘caos’ en el mercado europeo.

A día de hoy, según ha podido saber Plaza Deportiva, los equipos presentan sus propias propuestas económicas y será la Euroliga quien deba decidir qué ofertas aceptas y cuáles no. La resolución, supuestamente, se deberá conocer tras la Final Four, que se disputa este fin de semana.

Trece propietarios, cinco plazas y mucha incertidumbre

No hay que olvidar que la Euroliga está controlada por trece equipos propietarios que no deben abonar este canon y que tienen contrato en vigor hasta la temporada 2026/27. Eso sí, no todos han renovado todavía, como es el caso de Real Madrid y FC Barcelona. Con un total de 18 participantes actuales, existen cinco plazas disponibles de equipo que no son propietarios. Aunque, no está descartada una ampliación a 20 que parecía segura, pero que ahora mismo su aprobación no es para nada segura, al contrario.

El resultado es un escenario delicado: la Euroliga ha subastado sus plazas y, ante la falta de aceptación inicial, son los propios clubes quienes contraofertan. Una puja abierta donde nadie tiene garantizado su sitio, ni están seguros de quererlo, y donde todo puede cambiar en cuestión de días.

La BCL gana terreno con el respaldo de la NBA

En paralelo, ante las idas y venidas de la Euroliga, una alternativa crece con fuerza: la Basketball Champions League. Aunque históricamente con menos prestigio, esta competición respaldada por la FIBA ha ganado peso tras el anuncio de la llegada de la NBA a Europa de la mano de la federación internacional. Un desembarco que parece estar previsto para 2027 y que puede cambiar el baloncesto europeo.

Casos como el del Alba Berlín, que ha abandonado la Euroliga para sumarse a la BCL, son ejemplos del aumento del interés y además, no son hechos aislados. Varios clubes estarían valorando seguir los pasos del conjunto alemán, incluso rescindir sus contratos actuales con Euroliga.

Una decisión con impacto a medio plazo

En este contexto, la Champions League ofrece una oportunidad de crecimiento: dos años asegurados de participación y estar ya presente en la órbita de la NBA para su desembarco, aunque sin estar seguros de la participación en ello. El riesgo, claro, es pasar dos temporadas en una competición menos mediática que la Euroliga. Pero aceptar una oferta de tres años con Euroliga también implica renunciar a moverse si el escenario cambia bruscamente en favor de FIBA y NBA.

Por eso, la decisión debe ser meditada. Las próximas semanas serán decisivas para marcar el rumbo europeo del club, en un momento en el que cada movimiento puede condicionar no solo el futuro inmediato, sino también el encaje de los ‘taronja’ en el nuevo mapa del baloncesto europeo.

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