ALICANTE. El Hércules y su Fundación suscribieron el 31 de agosto de 2021, el día en el que Abdessamad Ezzalzouli 'Abde' compró su libertad abonando los 2.000.000 euros a los que ascendía su cláusula de rescisión, un contrato de depósito de garantía con objeto de que la citada suma sirviera al club para cumplir en los meses siguientes con obligaciones de pago ineludibles para asegurar su normal funcionamiento y por extensión su viabilidad, no obstante no corresponderle percibir esa suma al no ser titular de los derechos del jugador.
Precisamente la existencia del citado contrato, lo que el mismo establecía, es lo que llevó a que fuera el Hércules y no la Fundación la que dispusiera, de manera gradual y totalmente reglada (en la forma de 34 cheques), de la citada cantidad. Al menos así lo explicó la mañana del lunes Carlos Parodi en su comparecencia ante la magistrada titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Alicante en calidad de investigado por la presunta comisión de un delito de alzamiento de bienes a cuenta del citado proceder. Su defensa legal presentaba este martes ante ese órgano jurisdiccional dicho contrato "como complemento de lo declarado", tal y como se recoge en un escrito al que ha tenido acceso Alicante Plaza y al que también acompaña el convenio marco formalizado por el Hércules y la Fundación (por Valentín Botella y Miguel Campoy, presidentes entonces del club blanquiazul y su fundación, respectivamente) el 14 de junio de 2011 y un anexo al mismo suscrito tres años después.