VALÈNCIA. Iván Romero es el máximo goleador del Levante en lo que va de temporada. Con cinco dianas y contra pronóstico, el delantero manchego se ha convertido en el artillero de referencia de Julián Calero, sin ser, ni mucho menos, primera espada para el técnico desde el inicio del curso. Sin embargo, sí acumula seis encuentros de Liga siendo titular. Entre las lesiones de Brugui y la reciente con recuperación exprés de Morales, además de las dificultades de Fabrício para recuperar ritmo -a pesar de ser una de las figuras en las que más esperanzas se depositaron antes de su caída al dique seco en verano-, Romero ha dado un paso al frente.
El ex del Sevilla, eso sí, los anota de dos en dos. Marcó un doblete ante el Deportivo de la Coruña antes del inesperado parón por la DANA, y este miércoles hizo lo propio frente al Málaga. A ese póker, hay que añadir el que marcó en Ipurúa en solo 22 minutos de juego de los que dispuso desde el banquillo. Son más que Brugui y más que Morales, quien está a punto de convertise en el máximo artillero de la historia del club granota -está a solo dos tantos de los 75 de Roger Martí en todas las competiciones-.