VALÈNCIA. Un Valencia gris sufre el primer tropiezo de la pretemporada a manos del Real Zaragoza. Los de Bordalás acusaron las bajas y la falta de refuerzos y se vieron superados por los maños. Nárvaez y Fran Gámez hicieron los goles del partido.
El Zaragoza asumió el dominio del partido ante un Valencia que seguía perfeccionando su presión alta, pero sin tener protagonismo con el balón. Los maños generaron peligro con un centro de Fran Gámez que sacó Diakhaby con apuros. Antes del cuarto de hora, Cristian Rivero salvó a su equipo. Saque de esquina que cabeceó Iván y obligó al guardameta a sacar dos manos providenciales. El Valencia todavía no le había cogido el pulso al partido.
El Zaragoza estaba mejor y se reflejó en el marcador a los veinte minutos. Buena combinación que finalizó Nárvaez a la red. Muchas facilidades dio la zaga valencianista en la acción. El resultado era justo después de una media hora muy pobre del equipo de Bordalás. La primera jugada de ataque del Valencia llegó en el 34. Guedes dribló por el central y su chut se marchó arriba. Al filo del descanso, Narváez volvió a ‘desnudar’ a la defensa del Valencia. El ‘7’ zaragocista se deshizo de Paulista y cedió a Fran Gámez. Era el 0-2 tras un primer tiempo flojísimo del Valencia. Pudo recortar distancias Maxi, pero el cabezazo se marchó alto.
Ya en la segunda parte, Bordalás dio entrada a Alderete y Correia por Menargues y Javi Guerra. Subió Diakhaby para formar doble pivote con Guillamón. El Valencia tenía que dar un paso al frente. Las fuerzas se igualaron, pero era insuficiente para meterse otra vez en el partido. Muchas carencias del Valencia para generar peligro en ataque estático. El Zaragoza estaba cómodo en defensa y acarició el tercero. Adrián finalizó un contragolpe que despejó Rivero con una buena intervención.
A falta de 25 minutos, Bordalás quitó a casi todas las vacas sagradas para dar descanso a las piernas. Gayà, Maxi Gómez y Guedes se fueron al banquillo y eran minutos para los menos habituales. El Valencia estaba instalado en campo contrario, pero era el Zaragoza el que amenazaba al contragolpe. No había ideas en el Valencia más allá de colgar balones al área en busca de un remate que acabase en gol. La tuvo Sobrino, pero no conectó el centro de Correia. Finalmente, el Valencia consumó el primer tropiezo de la pretemporada.