CASTELLÓ. El Castellón afronta el partido de la última jornada de la fase regular ante la Real Sociedad B sabiendo que el empate le vale para firmar la tercera posición en la clasificación y lograr así una ventaja teórica en la primera eliminatoria por el ascenso.
Sin embargo, los albinegros no pueden jugar a especular, pues un exceso de conservadurismo reduciría al mínimo sus opciones de puntuar. Además, un triunfo supondría un premio moral importante pensando en la promoción.
Tanto jugadores como entrenador lo han dejado de manifiesto en los días previos al choque frente al filial donostiarra. “Contra la Real Sociedad B debemos ratificar lo que somos para el play off y tenerlo claro como ante el Real Unión”, ha declarado Borja Granero, recordando las muchas ocasiones que tuvo el conjunto orellut en su último compromiso.
Por su parte, Giorgi Kochorashvili vaticina un partido de muchas opciones de gol para el Castellón en tierras vascas. “Iremos a por la victoria y todo dependerá de si aprovechamos las ocasiones que tengamos. Creo que vamos a generar mucho y debemos estar capacitados para convertir las ocasiones”, ha comentado.
El conjunto guipuzcoano también saldría airoso con un empate, ya que certificaría así su clasificación para el play off, pero una victoria le situaría en la tercera posición que ocupa ahora el Castellón, por lo que los tres puntos le fortalecerían aún más de cara al primer cruce.
Por ello, Pablo Hernández reconoce las dificultades que le esperan al equipo de la Plana en Zubieta. “Es uno de los mejores equipos a los que nos hemos enfrentado esta temporada y será un partido complicado”, advierte el centrocampista.
Albert Rudé podría aprovechar este encuentro para dar descanso a algunos de los futbolistas con más carga competitiva, tal como hizo ante el Real Unión. Pero su meta será disputar el choque con intención de ganarlo. “Nos queda un partido y jugamos contra un rival directo. Hay que seguir trabajando para mejorar porque queremos quedar lo más arriba posible”, ha indicado el técnico.