Pulso contra Unicaja por la ventaja de campo en el playoff

VALÈNCIA. El partido contra el Unicaja es uno de los dos duelos directos que le quedan a Valencia Basket en la seis jornadas que quedan de liga regular. Dos finales antes del playoff. El equipo dirigido por Txus Vidorreta afronta un vibrante pulso para dejar el colchón respecto a su perseguidor más directo, Unicaja de Málaga, en tres victorias de ventaja. Los taronja ocupan actualmente la cuarta posición de la tabla, empatados en triunfos con el tercero, el Barça de Pesic (que el Valencia Basket recibirá en la penúltima jornada), y con solo una victoria por debajo del Baskonia, segundo clasificado. El objetivo del Valencia Basket para el día de hoy es doble: certificar casi de manera virtual la posibilidad de ser cabezas de serie y tener ventaja de campo en el playoff y seguir aspirando a ocupar la segunda plaza de la Liga al fin de la temporada regular. 

Txus Vidorreta contará en el día de hoy con 10 jugadores disponibles, con la novedad de que Joan Sastre está listo para jugar después de sufrir un pinchazo en los isquios en el choque contra el Zaragoza. Tibor Pleiss será duda hasta el último momento por la fascitis plantar que arrastra. Son baja segura Fernando San Emeterio (rotura fibrilar en el sóleo izquierdo), Guillem Vives (tenosinovitis en el tobillo izquierdo) y el lesionado de larga duración Antoine Diot. 

Pese a que las bajas siguen haciendo mella en la plantilla, Valencia Basket llega en un gran momento de forma tras conseguir cuatro victorias consecutivas, una de ellas contra otro rival directo, el Baskonia de Pedro Martínez. El conjunto taronja está haciendo de la Fonteta un gran fortín (pese al tropiezo frente a UCAM Murcia) y en las últimas temporadas ha sido uno de los escenarios más temidos por Unicaja de Málaga, que ha sido el rival más frecuente de Valencia Basket junto al Real Madrid. Este será el decimosexto choque entre estos dos equipos en las últimas tres temporadas. Concretamente en el pabellón de la Avenida Hermanos Maristas, el triunfo se ha quedado en Valencia en seis de las últimas siete visitas de los andaluces. Eso sí, los malagueños consiguieron proclamarse Campeones de la Eurocup, hace ahora un año, en la Fonteta, en esa final de los taronja para el olvido.

Esta temporada, el balance está siendo favorable al equipo dirigido por Txus Vidorreta, que se ha llevado tres de los cuatro encuentros que han disputado hasta el momento: la semifinal de la Supercopa Endesa y los dos partidos de Euroliga en la Fonteta y en el Martín Carpena. El único duelo que se han llevado los de Joan Plaza fue el correspondiente al partido de ida de Liga Endesa que ganaron por 7 puntos. Una diferencia que Valencia Basket debe superar para poder tener el basket average a favor, en un hipotético empate en la clasificación al fin de la temporada regular. 

Unicaja también está de dulce con cuatro triunfos conseguidos de manera consecutiva, el último contra el Barça. Un partido que fue no apto para cardíacos y que tuvo como líderes verdiblancos a dos jugadores a tener especial en cuenta para el duelo de hoy: el escolta ex taronja Nemanja Nedovic y el experimentado ala-pívot Carlos Suárez. Dos hombres que no restan protagonismo a un roster malagueño amplio y de mucha calidad en todas las posiciones, con buen nivel defensivo y capacidad anotadora. Ls única ausencia en el cuadro visitante es la del pívot georgiano Giorgi Shermadini, que es baja por una fractura por estrés del cuarto metatarsiano del pie izquierdo.

En un partido de tanta importancia a nivel de objetivos tampoco faltan los motivos festivos. Will Thomas y Latavious Williams celebrarán frente a Unicaja sus respectivos aniversarios en Liga Endesa, con 150 y 100 partidos jugados, respectivamente. Además, Rafa Martínez está a solo 3 triples meterse en el Top-5 histórico de triplistas de la Liga Endesa y podría igualar al retirado Raúl Pérez, que dejó su cifra en 770. Conociendo los números del capitán en la Fonteta, Rafa Martínez podría hasta superarlo y quedarse con la quinta plaza en solitario. Qué mejor que hacerlo contra un rival histórico.