opinión pd / OPINIÓN
'Quo vadis' Peter Lim?
21/11/2021 -
VALÈNCIA. Tras hacerse públicas las cuentas del Valencia me pongo a temblar. Sabía que estábamos mal. Pero no tanto. Esta semana he leído que Peter Lim quiere empezar de cero y que su idea es llevar al club a la casilla de salida. Se me disparan las ideas por la cabeza. Maldigo hasta en hebreo. Sí, por rocambolesco que parezca, eso es lo que se filtra desde el club para tratar de silenciar un clamor a gritos. Y, lo que es peor, hay gente que le compra esa jaimitada al departamento de fontanería que Meriton tiene instalado en la sede del club. ¿Empezar de cero? ¿De verdad? ¡Venga, por favor, que ya son siete años los que ustedes llevan aquí! “Que al Valencia no se viene a aprender sino que se viene aprendido”, que dice el irrepetible José María García en todas sus entrevistas.
Ahora, tras dejar al Valencia al borde del abismo (si es que no estamos ya dentro) a Anil Murthy se le ha ocurrido la brillante idea de decir que el grupo de gestión asiático ya ha aprendido de los errores cometidos y que éstos no se van a volver a repetir. Que Singapur ha trazado un plan eficaz para regresar a Europa a medio plazo y que el equipo va a reverdecer viejos laureles en un periodo no tan lejano como parece. No señor Murthy. Por ahí sí que ya no paso. Hasta aquí hemos llegado. A Peter Lim se le ha agotado el crédito en Mestalla. Y punto. Su gestión ha sido caótica. Nefasta. Y punto. La peor de la centenaria historia de la entidad, que se dice pronto. Estamos en una situación límite y no podemos andarnos con más tonterías de las suyas. ¿Empezar de cero?. ¡Venga ya!.
¿Cuál es ese nuevo plan que ustedes nos quiere vender? ¿Cuál es la solución para los males del Valencia? Eso no lo dicen en Singapur. Porque ni saben ni lo saben. Ni saben de fútbol ni saben como salir de esta situación. No hay contestación a ninguna pregunta que se les pueda hacer. No hay respuesta al drama de Mestalla. Peter Lim aterrizó en València hace siete años para convertir el equipo en uno de los grandes de Europa, solventar la deuda y poder terminar el estadio. A día de hoy, el Valencia es un equipo mediocre, debemos más que Alemania después de la guerra y el bulto ese de cemento -por llamarlo de alguna manera- sigue ahí para vergüenza de todo aquel que transite por la Avenida de las Cortes. Y para colmo, saber qué va a suceder dentro de tres meses tras la moratoria del Consell, es un misterio.
Nos han engañado. Así de simple. Primero Amadeo Salvo y Aurelio Martínez. Luego, Peter Lim y ese grupo de vividores que tiene instalados en nuestra ciudad. ¿Cuál es el plan Anil? Insisto. Si este año vamos a pérdidas y la previsión es perder todavía más la próxima temporada. ¿Cuál es la solución, presidente? Ninguna. La hay, pero ustedes no la saben. Peter Lim no tiene proyecto. Ni siquiera plan B. Meriton nunca ha tenido brújula. Ni puerto al que dirigirse. Su hoja de ruta ha pasado y pasa por la improvisación. Y la de Murthy por la desvergüenza. Solo cuando se confió en profesionales del fútbol, como debe ser, pudimos disfrutar de un año de bonanza deportiva. Pero Lim, en una decisión pirotécnica, muy nuestra y muy fallera, no tuvo reparos en dinamitar todo lo bueno que había construido. Hacer un equipo campeón cuesta mucho. Deshacerlo, muy poco.
Noticias relacionadas