VALÈNCIA. El alcalde de València, Joan Ribó, ha afirmado que debería ser el Valencia CF el que explicara la posibilidad de que el club no se traslade al nuevo estadio que se encuentra con las obras paralizadas en la Avenida de les Corts y se mantenga en el viejo Mestalla.
Ante las informaciones aparecidas sobre la posibilidad de revertir la situación prevista, Ribó ha explicado antes del pleno de este jueves que hasta ahora "daba por supuesto un cambio al nuevo Mestalla", aunque si hay una opción diferente, tendrían que "estudiarla".
El Valencia inició las obras del nuevo campo en 2007 y las paralizó por falta de financiación en 2009. desde entonces se han producido algunos intentos de reanudación, pero ninguno ha prosperado y ahora el club está a la espera de la venta del viejo campo para poder reanudarlas.
"El Valencia tendrá que explicarnos qué quiere hacer", ha indicado el alcalde, que ha añadido que la información de que disponen es un "rumor" y que no la iban a evaluar.
"El Valencia es el que tiene que hacernos un planteamiento serio y, con calma, pero algún día lo tendrá que hacer", agregó el alcalde.
Preguntada sobre este asunto, la portavoz del grupo socialista, Sandra Gómez, ha indicado que "hasta que no haya una propuesta formal" del club y se traslade "de forma institucional la voluntad al Ayuntamiento", no se iban a pronunciar porque no podían "marcar posiciones a golpe de titulares".
No obstante, el concejal de Urbanismo, Vicent Sarriá, ha incidido en que la operación de Mestalla se basa en una actuación estratégica que depende de la Generalitat y una modificación así, además de "absolutamente compleja", debería contar con el visto bueno del Consell.
"Hay un convenio que se está cumpliendo entre el Ayuntamiento y el Valencia, que se materializó en su momento en una permuta de solares ya efectuada. Se están produciendo los pagos de las compensaciones que preveía y la última información de que dispongo hace referencia a una tramitación de la licencia para continuar las obras del nuevo estadio", ha afirmado.
Sarriá ha hecho hincapié en que "de materializarse la propuesta, debería dar el visto buen la Generalitat y revestiría una complejidad importante" y ha recordado que "cualquier opción que pasara por mantener el estadio, tendría que atender a las sentencias vigentes" que dictaron el derribo de parte de la gradas.
"Entiendo que es una propuesta, que no se de donde ha salido, pero que es absolutamente compleja", ha apuntado.
La portavoz de València en Comú, María Oliver, ha apuntado que le parece "curioso" que "siempre" estén "arreglando los destarifos que se hicieron" porque, a su juicio, tanto la permuta como la ampliación de Mestalla lo fueron "desde el primer momento".
"Hay que estudiar bien la propuesta, pero en este momento estamos tramitando también un pabellón en la otra punta de la ciudad y parece un poco absurdo la demolición de uno que está sin acabar", ha sostenido.
El concejal del PP Alfonso Novo ha explicado a EFE que sería "muy complicado" revertir el acuerdo aunque debería ser "el club, de acuerdo con la mayoría de su masa social, quien decidiera si sigue adelante con el nuevo estadio o se queda en Mestalla".
"Entiendo que hay una parte sentimental de muchos socios y seguidores del Valencia a los que les gustaría seguir en el viejo estadio, pero eso implicaría, desde el punto de vista de la tramitación urbanística, retrasar cualquier actuación posiblemente más de diez años", ha advertido.
El portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, ha criticado que al alcalde le falta "diálogo y gestionar" y le ha reprochado que diga que ese asunto "depende de otros agentes y no es competencia del ayuntamiento".
"Lo único que sé es que ese estadio que se cae y está a medio construir está en mi ciudad y no quiero que mis ciudadanos y los turistas vean esto", ha denunciado, al tiempo que ha exigido a Ribó que cree una mesa de diálogo para dar solución a este asunto que "claro que es de los valencianos y de València porque el estadio está en la ciudad".