VALÈNCIA. Valencia Basket viaja a San Sebastián para disputar el último partido aplazado que le queda por jugar. El conjunto taronja llega tras conseguir dos victorias la pasada semana y Rubén Burgos valora el enfrentamiento.
El técnico espera que sea “un partido de máxima exigencia, siempre lo ha sido así, y este año especialmente los resultados están acompañándoles. Creo que su último fichaje de Lauren Cox las ha hecho todavía más peligrosas en los dos lados de la cancha. Creo que son solventes tanto en ataque como en defensa”.
Las dos semanas de parón por selecciones y los dos triunfos de la pasada semana han permitido que el equipo llegue “en buena dinámica de trabajo, también de confianza. Creo que ha habido parciales en los que no hemos estado todo lo bien que queríamos tanto en Gernika como en nuestra pista contra Promete, pero la mentalidad, la reacción del equipo y por fases del partido el buen juego, nos hace ver que estamos en crecimiento y en continua mejora”.
Respecto a las fortalezas de las vascas, Burgos analiza que “sobre todo, IDK es un equipo muy equilibrado y bajo la dirección de Azu Muguruza todas las temporadas ha sido uno de los mejores equipos defensivos de la liga alternando individuales, zonas y este año es un equipo muy físico. Tanto en línea de bases con Cornelius, en línea exterior con Joy Adams y Harden, en interiores sobre todo con Lauren Cox y Coulibaly. Muchos centímetros, mucho peso en la pintura y jugadoras que conocen muy bien el juego”.