VALÈNCIA. La ermita de Santa Lucía de Alcossebre acogerá el final de la etapa reina de la Volta a la Comunitat Valenciana, con cuatro kilómetros de ascensión con rampas de hasta el veinte por ciento, con una pendiente media del 8,5 y cuya salida habrá tenido lugar en Vila-real.
Vila-real y Alcossebre son dos localidades costeras de la provincia de Castellón, que lejos de deparar un recorrido llano obligarán a los ciclistas a superar 3.000 metros de desnivel positivo con una orografía sinuosa y continuas subidas y bajadas.
Un final de etapa marcado para un ciclista importante y que decidirá el ganador de la Volta a la Comunitat Valenciana 2019 que se desarrollará entre el 6 y el 10 de febrero.
La ermita de Santa Lucía será por segunda vez escenario de un final de etapa. El anterior fue el de la Vuelta Ciclista a España de 2017, cuando el kazajo Alexéi Lutsenko se adjudicó la victoria.
Alejandro Valverde será uno de los integrantes del pelotón que disputará esta Volta, en la que buscará su cuarta victoria en la general.
El director de la Volta, Ángel Casero, ha explicado que la meta estará en un lugar emblemático tras recorrer el interior de Castellón.