VALÈNCIA. Los palistas españoles Saúl Craviotto y Carlos Arévalo no pudieron conseguir medalla en la final de este jueves del K1 200 metros del piragüismo de los Juegos Olímpicos de Tokio, tras finalizar séptimo y quinto, respectivamente.
Los dos K1 se habían conseguido meter en la final y aspiraban a un podio, que en el caso del catalán le habría permitido igualar a David Cal como el deportista nacional más laureado a nivel olímpico con cinco metales, pero tendrá que esperar ahora al K4 500 metros.
La veteranía de Craviotto no le sirvió en este caso en una prueba explosiva donde cedió metros de inicio y ya no pudo recuperarlos para soñar con la medalla. Ya le había pasado en las semifinaless de un par de horas antes, pero ahí sí encontró la energía en sus paladas para quedarse con el último boleto para la final, con una décima de ventaja sobre el ruso Evgenii Lukantsov.
El gallego Arévalo rayó mejor en las semifinales, donde estuvo siempre en los puestos delanteros para conseguir su pase a la pelea por las medallas con mucha más suficiencia y con unas sensaciones que parecían mejores que las del cuádruple medallista olímpica.
Y esto se confirmó en la final donde el de Betanzos salió fuerte y estuvo peleando con los candidatos a saborear un metal, pero no pudo mantenerse y finalizó en una quinta posición, a dos décimas de la medalla de bronce.
El ilerdense, en cambio, no consiguió arrancar bien y sólo pudo ser séptimo, lejos de un podio que encabezó el húngaro Sandor Totka, que se impuso por escasas 45 milésimas al italiano Manfredi Rizza, mientras que el tercer lugar fue para el británico Liam Heath, oro hace cinco años en Río de Janeiro.