El técnico asegura que la palabra "revancha" es negativa y que prefiere hablar de "oportunidad" frente al Real Madrid en la final de la Liga de Campeones
VALENCIA. Diego Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, asegura que la palabra "revancha" es negativa y que prefiere hablar de "oportunidad" frente al Real Madrid en la final de la Liga de Campeones, este sábado en Milán.
En una entrevista con uefa.com, el técnico argentino afirmó que "en el fútbol como en la vida no hay revanchas, hay nuevas oportunidades".
"Yo creo que revancha es una palabra negativa, porque recuerda derrotas, momentos malos, en cambio oportunidad habla de optimismo, habla de seguridad, habla de confianza y habla de lo que estar por venir, de lo que queremos, que es la Champions League", explicó.
Simeone está convencido de que el Atlético ha eliminado a "dos de los tres mejores equipos del mundo", por el Barcelona y el Bayern Múnich, y que en la final van a enfrentarse "al tercero".
Del Real Madrid dijo que "posiblemente es un equipo diferente al Barcelona o al Bayern de Múnich, un equipo mucho más directo, con un peligro enorme en pelota parada, con una fortaleza defensiva buena, sobre todo con Pepe, Varane y Ramos, y la presencia de Casemiro le ha dado mucho equilibrio a un equipo que tiene un potencial ofensivo muy grande".
Nosotros nos prepararemos para intentar llevar el partido a dónde nosotros creemos mejor para nosotros y que eso nos lleve a lo que queremos, que es ganar", subrayó.
Al ser preguntado por las diferencias entre este Atlético y el de la final de 2014, en la que perdió con el Real Madrid en la prórroga, señaló: "Aquel llegaba de una final seis días antes con el Barcelona. Aquel llegaba con la presencia de dos de sus futbolistas más importantes como Arda y Costa tocados, y con un grupo posiblemente más maduro. Hablo de Villa, hablo de Raúl García, hablo de Diego Ribas, hablo de Sosa, hablo de Mario Suárez... Este grupo es diferente porque tiene mucha más juventud, mucha gente joven que va a pasar por esta primera experiencia y aquel era seguramente mucho más maduro".
Reconoce que aquella derrota les afectó a todos: "Las derrotas siempre son malas. Pierdas lo que pierdas. Y me afecta lo mismo que le afecta a cualquier ser humano que pierde un partido, ni más ni menos que eso".
Simeone admite un estilo de juego propio. "Hace cuatro años y medio que trabajamos sobre un estilo de juego y de intensidad sobre todo en nuestras formas, y obviamente que trabajamos para conseguir ese nivel. Hay mucha gente que se rompe la cabeza para lograr ese estado del futbolista, sobre todo los profes (preparadores físicos), nosotros en la metodología de los entrenamientos y eso, con algunos cambios que hubo, siempre hemos tenido un mismo nivel de intensidad".
"Cuando llegan jugadores nuevos", indica, "ellos entienden las formas que se necesitan para jugar en el Atlético de Madrid, porque está claro que cuando llegas al Atlético de Madrid talento tienes, pero debes ser parte del grupo, trabajar duro y poner el corazón".
Sobre el significado que para él tendría ser el hombre que llevó al Atlético a ganar su primera Champions, dijo: "Yo creo que las palabras cuentan poco. Cuando oigo a la gente hablar de lo que le gustaría, de lo que quisiera, son situaciones que quedan demasiado adelante. Yo vivo de la realidad, del momento y de lo que hay. Está claro que nos preparamos para ganar, pero no dependerá de lo que yo quiera, sino de lo que nosotros forcemos para que venga para nuestro lado".