En la general no hubo variación y Darwin Atapuma continúa como líder de la clasificación general
VALENCIA. El ciclista Simon Yates (Orica-BikeExchange) se ha impuesto este jueves en la sexta etapa de la Vuelta a España, disputada entre Monforte de Lemos y Luintra, en la Ribeira Sacra, sobre 163,2 kilómetros en una jornada dura y exigente por un terreno sinuoso donde el británico aprovechó un ataque en el momento preciso para anular la fuga e impedir a su vez una llegada masiva.
Se dio un bonito pulso entre el pelotón, tirado en la parte final y decisiva por un Movistar ambicioso, y una fuga que pese a ser nutrida quedó reducida al final a un 'estira y afloja' entre Mathias Frank (IAM) y Jan Bakelants (AG2R) y Andrey Zeits (Astana), que venían por detrás. Pero el pelotón dio caza al dueto a 4,6 kilómetros de meta y Yates, en solitario, al suizo a 3,7 kilómetros de Luintra.
Los cañones del Sil mostraron, más allá de su belleza, un terreno duro para las piernas de los ciclistas, en una jornada con calor que hizo todavía mayor el desgaste y el consiguiente espectáculo creado por la persecución y la posterior lucha por el triunfo de etapa donde Yates estuvo inconmensurable. Sin cambios en los favoritos, Darwin Atapuma (BMC) sigue como líder de la general provisional.
Pese a que la etapa no era demasiado larga la dureza llegó por el calor y por el terreno, claramente 'rompe piernas' con solo un puerto puntuable para el premio de la montaña pero con un sube y baja constante, con carreteras estrechas y de piso rugoso que fueron una pesadilla para el pelotón. Aún así la carrera estuvo movida e hizo de esta etapa una de las mejores en lo que va de Vuelta a España.
Parecía que la etapa podía tener sabor nacional, primero porque Omar Fraile (Dimension Data) probó fortuna a más de 50 kilómetros de la meta al saltar de entre la escapada y coger una buena renta sobre sus compañeros de fuga. Llegó a disponer de más de un minuto sobre sus perseguidores y tres minutos sobre un pelotón que, con un arreón del Orica y después con el empuje final del Movistar, acabó con todo.
Si Fraile soñó con el triunfo en la Ribeira Sacra también lo intentó hacer Dani Moreno (Movistar), quien aprovechó que el Movistar tiraba en cabeza del pelotón para pillar desprevenidos al resto de equipos y saltar en solitario en busca de Mathias Frank (IAM) y el resto de escapados que ya iban, sin fuerzas, dispuestos a ser engullidos.
Pero no les salió bien la jugada dado que Simon Yates se fue a por él y no solo le atrapó sino que le dejó sentado, igual que al suizo, para tirar de piernas hasta celebrar el triunfo. Moreno, duodécimo en la general a la salida de la etapa, intentó agarrarse a la rueda del británico pero le fue imposible, y es que el gemelo mostró tener fuerzas y, aunque esta aquí para ayudar a su líder Johan Esteban Chaves, podría ser una alternativa.
De cara a este viernes, después de esta etapa sin descanso, llega la séptima jornada de la Vuelta. Con salida en Maceda y llegada a Puebla de Sanabria tras 158,5 kilómetros, será la primera que acabe fuera de Galicia después de una semana de claro protagonismo gallego. Una etapa también de recorrido sinuoso y un perfil con tres cotas que pueden servir para una fuga o para que los 'gallos' se peleen entre ellos en busca de picar algún segundo.