VALENCIA. El Valencia CF tendrá que tomar decisiones sobre varios futbolistas jovenes que finalizan contrato en las próximas semanas. Dos de esos jugadores son Wilfried Zahibo y Carlos Soler. Uno de ellos ya es jugador de la primera plantilla por decisión expresa del míster, Gary Neville, mientras que el otro está siendo uno de los jugadores importantes del Mestalla en su remontada cuando todavía tiene edad juvenil.
Siendo dos situaciones totalmente diferentes ambos jugadores tienen una cosa en común, el club puede prorrogar el contrato de los dos de manera unilateral. Eso sí, con ambos se han mantenido negociaciones en las últimas semanas que ahora mismo están bastante lejos de concretarse.
Por su parte el marfileño negocia con el club de Mestalla una renovación como fubolista del primer equipo. Las cantidades que se manejan según ha podido saber PlazaDeportiva.com son las que está cobrando los futbolistas del primer equipo que dan el salto desde el Mestalla.
Suso García Pitarch, con la aprobación de Layhoon, está tratando de ajustar al máximo el contrato y el jugador quiere ganar algo más de dinero del que percibe jugando en el filial. Las posturas están alejadas y el club no tiene prisa por cerrar el acuerdo. Además, los de Mestalla tienen dos alternativas para renovar de manera automática al futbolista pero ambas podrían acabar en los tribunales. El club puede ejercer una cláusula existente para ampliar el contrato de manera unilateral o el contrato quedaría renovado automáticamente si el marfileño jugase 10 partidos con el primer equipo, ahora ya suma siete encuentros.
Ambas alternativas podrían ser denunciadas por el futbolista si entendiera que son las condiciones son negativas para él, y sería un juez el que dictaminaría una sentencia para otorgar o no validez al contrato.
SOLER, JUGADOR CON MÁS PROYECCIÓN DE PATERNA ESTE AÑO
La situación de Carlos Soler es diferente a la de Zahibo porque todavía no ha debutado con el primer equipo y porque su renovación la está llevando en primera persona el director de la escuela, José Ramón Alesanco al tratarse de un futbolista en edad juvenil y que está cumpliendo su primera temporada en el filial valencianista.
El mediocentro está siendo una pieza clave para Curro Torres en el despegue del filial y también finaliza su contrato con el Valencia CF el próximo 30 de junio. La entidad de Mestalla tiene una opción para prorrogar unilateralmente el contrato dos años más, pero como con Zahibo ese contrato podría terminar en los tribunales y con todas las de ganar para el futbolista porque ya existe jurisprudencia.
El Valencia CF se puso en contacto con el jugador hace aproximadamente un mes para ofrecerle una renovación en unas condiciones que al jugador no le han convencido. Entienden que no se adecua al mercado que ahora mismo tiene el futbolista. Soler tiene ahora mismo ofertas firmes de todos los grandes de la Liga, Barcelona, Real Madrid, Atlético de Madrid, Villarreal y Espanyol, además de varios equipos Premier que le siguen desde edad infantil.
Sin embargo, la gran amenaza es el equipo azulgrana. El FC Barcelona le ha presentado una oferta importante al jugador y además le asegura la proyección deportiva hacia el primer equipo. Eso es lo que el jugador quiere en Mestalla. Una apuesta deportiva. El jugador, por su parte, ve que pasan los meses y la propuesta del Valencia no fructifica y empieza a ver con buenos ojos la propuesta azulgrana, aunque sigue esperando un movimiento valencianista ya que su preferencia en seguir en Mestalla.
En las conversaciones el club ha avisado al jugador y a su entorno de que llegado el caso podría renovar el contrato de manera unilateral, pero eso es algo que si el jugador denunciara no tendría validez casi con total seguridad. Ahora mismo las posturas están muy alejadas. El futbolista espera una llamada del Valencia CF en las próximas semanas en la que se le presente una oferta de futuro. Soler quiere un proyecto deportivo en el que se le asegure que va a tener la opción de ser jugador profesional. El centrocampista entró con siete años en la escuela blanquinegra y su ilusión es jugar en el primer equipo. Ahora bien, quiere sentirse valorado por el club con una renovación de futuro y donde la ficha no sería el principal obstáculo si se le da confianza.
Tanto en el caso de Zahibo como en el de Soler el que debe mover ficha es el club. Se trata de un tema de confianza porque las cifras de sus renovaciones no son ni mucho menos inalcanzables. El club debe decidir si apuesta por ellos en lo deportivo y en tal caso ajustar lo máximo posible los números. En todo caso, ningún jugador está pidiendo cantidades desorbitadas.