Hoy es 16 de octubre
VALÈNCIA. La segunda entrega fue la eliminación del Sporting de Gijón a manos del Valencia CF. La crisis continuaba presente en el club de Mestalla y Marcelino comenzó a tomar decisiones dentro de la plantilla.
El partido de ida contra el Sporting de Gijón agotó la paciencia de Marcelino con Batshuayi. El belga falló en el primer minuto una ocasión indigna para un delantero del Valencia CF. Un fallo del defensa del Sporting le dejó solo dentro del área ante Dani Martin. Batshuayi lo tenía todo para batir al meta en el uno contra uno. Sin embargo, optó por regatear al portero y la jugada acabó siendo despediciada.
Ese error junto a las muestras de pasividad y falta de actitud en los anteriores partidos provocó que Marcelino le sustituyera al descanso. La idea era que se marchara en el mercado de invierno y así fue. En la rueda de prensa posterior, el técnico asturiano fue muy tajante al asegurar que la paciencia se había acabado con algún jugador: "Yo no hago los cambios para marcar a nadie, hago los cambios en función del rendimiento, el esfuerzo, la intención, de lo que veo en el campo, intento ser justo y a partir de aquí modificar. Tengo tres cambios y consideramos oportuno quitar a Michy en el descanso y meter a Rodrigo. Creo que tenemos que traer jugadores de arriba, la paciencia en algún caso ya se agotó. No quiero especificar mucho más..."
Mientras la experiencia de Batshuayi se acabó, el delantero francés no se rindió. Se negó a salir porque quería triunfar en el Valencia. Su primera vuelta fue decepcionante, pero a raíz del 2020 cambió el chip y comenzó a convertirse en un futbolista muy importante para el equipo. Empezó a entenderse con Rodrigo y acabó siendo una pieza fundamental para alzar el título ante el FC Barcelona.
En el encuentro de ida ante el Sporting, Gameiro hizo su primer tanto de un año que cambió su situación el club. Cabeceó a la red después de que el balón golpeara en el larguero tras un potente disparo de Parejo. También realizó dos buenas combinaciones con Kang In Lee y Gayà que pudieron ser gol y realizó un remate de chilena que se marchó alto. La mejor versión de Gameiro ya estaba en camino.
Otra de las grandes noticias de aquella eliminatoria de los octavos de final de la Copa del Rey fue el despertar de Ferran Torres de su letargo. El canterano de Foios estaba atenazado y no terminaba de explotar sus cualidades. De hecho, su primera parte en el partido de vuelta no fue la mejor. Sin embargo, tras el descanso Mestalla pudo presenciar el diamante que tenía en sus manos. Participó en dos de los tres goles del partido. Asistió a Santi Mina en el 2-0 y cerró la goleada al resolver un contragolpe con un recorte y remate con la izquierda.