El técnico cordobés, que suele hacer solo una sesión a puerta cerrada, únicamente permitirá el acceso de público este miércoles
VALENCIA. Alberto Toril, entrenador del Elche, ha modificado la rutina de trabajo habitual de su plantilla y ha aumentado esta semana el número de sesiones a puerta cerrada que realizará su equipo para preparar el encuentro del próximo viernes ante el Nàstic de Tarragona.
El técnico cordobés suele realizar cada semana una sesión sin presencia de público, pero en esta ocasión únicamente el entrenamiento del miércoles estará abierto a los aficionados y medios de comunicación.
El equipo regresa este lunes al trabajo con una sesión vespertina, a las 17:00 horas, en el Martínez Valero. El martes, ya en horario matinal, también se ejercitará en esta instalación sin presencia de público, al igual que el jueves, en el último entrenamiento previo al desplazamiento a Tarragona.
La medida llega en un momento especialmente delicado para el equipo ilicitano, que tras encadenar solo dos puntos de los últimos nueve ha visto como sus opciones de pelear por la promoción de ascenso se han reducido considerablemente.
Además, el equipo ofreció la pasada jornada, ante el Alcorcón, una mala imagen, lo que provocó que se escucharan las primeras protestas por parte de los aficionados en la presente temporada.
Alberto Toril ya realizó una medida similar con motivo de la última visita al Levante y, curiosamente, también blindó a su equipo en la primera vuelta en la semana previa al encuentro ante el Nàstic de Tarragona (4-4).
Para el encuentro ante el equipo catalán, el técnico del Elche podrá contar con todos sus efectivos, ya que recupera a Albert Dorca, baja por sanción la pasada jornada.