VALÈNCIA. Un gol de Rubén Mesa cuando el encuentro se acercaba al minuto 70 de partido fue suficiente para que el Villarreal B se llevase el derbi autonómico del Grupo III y doblegar, así, a un pobre VCF Mestalla, que en ningún momento supo imponerse a su rival. El partido fue un absoluto monopolio de los de Miguel Alvárez, que pudieron vencer con una ventaja mucho más cómoda de la que cosecharon finalmente.
En la otra cara de la moneda los de Miguel Grau ofrecieron los síntomas que viene arrastrando lo que llevamos de temporada: un equipo plano y que no sabe hacia donde camina. 85 días sin ganar y una sola victoria en el Antonio Puchades le han abocado a terminar el 2018 en puestos de descenso, lo que obligará a tomar decisiones de cara al inicio del nuevo año.