Un cambio radical: el Villarreal suma más del doble de puntos que el curso pasado a estas alturas

VILA-REAL. "Todos hubiéramos firmado ser terceros y sumar 17 puntos en la octava jornada", dijo Marcelino García Toral justo después de la victoria del Villarreal por 3-1 ante Las Palmas el pasado lunes. Unas palabras difícilmente discutibles especialmente si se compara el inicio de temporada del Submarino con el que vivió el curso pasado, cuando a estas alturas de campeonato ocupaba la decimocuarta posición con ocho puntos en su casillero. 

Casualmente, el octavo encuentro liguero de la 2023/2024 también se jugó un 30 de septiembre, pero en este caso fue un empate sin goles ante el Getafe en el que Filip Jörgensen evitó la derrota grogueta. Una coincidencia que permite poner de relieve dos situaciones diagonalmente opuestas. 

Hace 12 meses el club de La Plana Baixa ya había despedido a Quique Setién y no acababa de encontrar el rumbo con José 'Pacheta' en el banquillo. De hecho, el Villarreal necesitó 10 jornadas más para superar los 17 puntos: no lo logró hasta el 20 de diciembre con un triunfo por 3-2 ante el Celta de Vigo, ya con Marcelino como técnico. 

Un Marcelino que ha instaurado la tranquilidad y el optimismo en Miralcamp a base de buenos resultados y que, fiel a su estilo de máxima exigencia e intensidad, tiene a la plantilla y a la afición enchufadas por igual. Lo cierto es que los seguidores groguets tienen motivos fehacientes para soñar a lo grande.

El mejor inicio desde 2013

Los datos reflejan que se trata del mejor inicio de temporada (teniendo en cuenta las ocho primeras jornadas) en los últimos once años. Para encontrar un registro igual hay que remontarse al curso 2013/2014, cuando, también con Marcelino a las órdenes de la plantilla, el equipo sumó 17 puntos. 

Además, únicamente hay tres temporadas en las que el Villarreal haya empezado con mejor pie su andadura en LaLiga. Se trata de la 2007/2008 con 18 puntos, la 2008/2009 también con 18 puntos y la 2010/2011 con 19 puntos. Y todas estas campañas tienen algo en común: el Submarino terminó LaLiga en puestos europeos. 

En dos ocasiones logró clasificarse para la Champions League, la primera en el subcampeonato logrado en la 2007/2008 y la segunda en la cuarta plaza de la 2010/2011. Por contra, en la 2008/2009 obtuvo plaza de Europa League al quedar en quinta posición y en la 2013/2014 consiguió billete para la misma competición tras finalizar sexto.