VALÈNCIA. Era uno de los duelos más esperados de la Superliga enfrentando al primero y segundo de la clasificación. UPV Léleman Conqueridor viajaba con esperanzas de plantarle cara al líder en su casa, pero se encontró con un CV Guaguas intratable. El conjunto amarillo superó por 3-1 (25-20/21-25/25-15/25-) a los valencianos, que solo pudieron mostrarse mejores en el segundo set y que acabaron desesperados ante el dominio local en el resto del partido..
“La primera y segunda manga creo que se jugó bien. Tuvimos nuestras opciones, después nos dejamos llevar y nos desesperamos. Si le das algo de ventaja a un equipo como este es complicado. Se van dos puntos y ya juegan muy sueltos. Con el marcador ajustado podemos jugar con la presión, pero cuando se van es muy difícil pararles”, analizaba Marcos Dreyer al finalizar el partido.
CV Guaguas se apodera del primer set
El primer set se le escapó al UPV Léleman Conqueridor después de empezar con buenas sensaciones. Los valencianos estuvieron mejor en los compases iniciales, pero acabaron cabizbajos la primera manga al verse sobrepasados por la respuesta de los anfitriones. Los de Dreyer se marchaban tres puntos arriba de forma temprana y Camarero echaba el freno ante la buena racha de Manu Furtado al saque.
Los amarillos se recuperaban en el marcador con Emiliano Ramos como protagonista y empezaban a hacer daño psicológico al conjunto visitante. Un ace de Javi Monfort volvía a poner a un solo punto de diferencia el electrónico, pero el líder desplegaba todo su potencial. Una finta superando el bloqueo valenciano, una mala defensa cuando el balón se marchaba y un doble bloqueo a Pernambuco dejaban tocado anímicamente al Conqueridor, que se dejó llevar por la superioridad local hasta el 25-20 final.
Reacción valenciana
La reacción del equipo de Dreyer no se hizo esperar y en la segunda manga el equipo se rehízo de lo ocurrido. Como si nada hubiera pasado, los valencianos mantuvieron el ritmo impuesto de los locales que fueron siempre por delante en los primeros compases. CV Guaguas ponía la máxima diferencia del set con tres arriba, pero esta vez no hubo renuncia y el UPV Léleman se colocaba por primera vez por delante.
Miguel Camarero pedía el tiempo muerto y en la vuelta a pista se veía por fin la igualdad que reflejaba la clasificación. Punto a punto se iba alternando el marcador que acabó con la pausa de Marcos Dreyer cuando los locales se ponían 19-18 por delante. Un saque directo de Javi Monfort volvía a poner por delante a los valencianos, que después se atrevían con una finta de las manos de Facu Funes. UPV Léleman cogía aire y la entrada de Nacho terminaba dando una ventaja de más tres puntos que encarrilaba el 21-25.
El líder golpea de nuevo
Desde el inicio de la tercera manga el conjunto amarillo fue superior, volviendo a transmitir ese dominio del primer set. Tomas Rousseaux y Wallyson Bezerra causaban estragos y obligaban al tiempo muerto de Dreyer con el 12-7. Una tímida reacción de las manos de Rodrigo de Melo no fue suficiente para frenar a un imparable CV Guaguas que aumentaba a siete puntos la diferencia.
El set dejó muy frío todo lo conseguido en el anterior y ponía a los líderes como favoritos para cerrar el set y el partido. Bruno Nicolás ponía el 24-15 y un error en ataque valenciano terminaba por sentenciar las opciones del equipo, que no creyó desde prácticamente el inicio del set.
Incontestable Guaguas
Si el conjunto de Marcos Dreyer quería sacar algo positivo del Centro Insular de Deportes iba a necesitar de todos los factores a favor. Pero el guion fue un calco del anterior y se repitió de principio a fin el mismo patrón que en el tercer set. Los líderes tomaban cierta ventaja y dejaban una vez más sin respuesta al UPV Léleman, que se sintió superado nuevamente para terminar cediendo por 25-15 ante el conjunto grancanario.
“Sabíamos que iba a ser muy complicado pero teníamos nuestras opciones. Por momentos cuando íbamos parejos pudimos jugar de tú a tú, pero tenemos que tener nosotros un nivel muy grande para aguantar todo el tiempo y no fue así. Cuando tienen una racha y se van juegan muy cómodos, no tuvimos nada que hacer”, sentenciaba Dreyer.