El Valencia Basket necesita ganar, tras la desastrosa derrota contra Baskonia, para mantenerse en zona de Copa del Rey ante un conjunto catalán que es el único equipo de la Liga que todavía no ha perdido fuera de su pabellón
VALÈNCIA. El Valencia Basket recibe esta noche al Baxi Manresa en un momento de urgencias frente a un rival que tiene la condición de mejor equipo a domicilio tras haber ganado todos los partidos lejos del Nou Congost. El conjunto taronja llega con un balance de 3-4 tras haber caído de forma contundente en Vitoria contra Baskonia y los catalanes lo hacen con un 4-3 que les deja en la séptima posición, un lugar por encima que el Valencia Basket.
El Baxi Manresa se ha presentado como el equipo revelación de esta temporada. Recién ascendido y con una plantilla joven, la confección del equipo por parte del club para la vuelta a ACB ha sido de lo más acertada. Pese a que buscan más consistencia en su pabellón, tras haber sufrido sus tres derrotas ante su público, se han mostrado como el equipo más entonado fuera de casa. Ya ha asaltado las pistas de Estudiantes, Andorra y UCAM Murcia. El conjunto de Joan Peñarroya lleva dos triunfos consecutivos, el último contra Herbalife Gran Canaria.
Liderados por el alero Pere Tomàs, el Manresa ha hecho fichajes conocidos de la talla de Alex Renfroe, exjugador del Barcelona y que el Valencia Basket echó el ojo la temporada pasada durante su estancia en Galatasaray, o el extaronja Justin Doellman. Único MVP de la Liga Endesa en la historia del Valencia Basket. Actualmente la estrella del equipo es el base norteamericano, mientras que el veterano pívot acaba de volver de una lesión.
Por su parte, el Valencia Basket tiene buenas noticias en su enfermería aunque todavía no tendrán impacto sobre la pista. Antoine Diot y Rafa Martínez empezarán a entrenar con sus compañeros a partir del próximo lunes. El base, con problemas musculares, y el capitán, recuperándose de la operación de rodilla, ya se han ejercitado con el filial y su regreso al parqué está cada día más cerca. La nota negativa la pone en este caso Joan Sastre, que ha recaído de la lumbalgia aguda que padece desde el pasado 10 de octubre y en estos momentos no tiene plazos de recuperación.
Este partido será una prueba de fuego para el Valencia Basket pero, concretamente, para Jaume Ponsarnau. La figura del entrenador se empieza a cuestionar tras el mal arranque del equipo y la falta de competitividad ante rivales directos tanto en Liga Endesa como en Eurocup. El técnico aseguraba en la previa que su figura no está en la picota solo en este partido sino en todos, incluso en los amistosos. Aparente tranquilidad la que mostraba el catalán pese a que una derrota le pondría en la cuerda floja casi con total seguridad.
La diferencia entre la victoria y la derrota está en alcanzar la quinta posición por debajo del Baskonia, Real Madrid, Barça y Unicaja, si Iberostar Tenerife y Divina Seguros Joventut no ganan su partido, o hasta poder caer de los puestos de Copa del Rey, en la que el Valencia ahora está como corte en la octava plaza.
La presión está sobre el tejado de la Fonteta. Jaume Ponsarnau reconocía que el Manresa es el "peor equipo" al que el Valencia Basket pudiera enfrentarse ahora por la confianza, el desparpajo y la valentía con la que juegan los catalanes, frente a la falta de confianza de algunos jugadores taronja y la necesidad del equipo de sacar una victoria.
Pese a la derrota en Villeurbanne, el conjunto valenciano dio señas de mejora respecto a la catástrofe en Vitoria. Hoy no cabe otra posibilidad que dar un paso de gigante hacia el frente y derrotar a un equipo al que domina históricamente en la Ciudad del Turia. El Valencia Basket ha ganado en casa al Manresa en 21 de las 27 visitas de los catalanes, encadenando además ocho triunfos consecutivos y remontando la última victoria visitante hace ahora diez años.