El conjunto taronja necesita continuar con su racha de diez partidos consecutivos ganando como local en Liga en un partido con falta de efectivos por las bajas de Fernando San Emeterio y Guillem Vives y las dudas de Bojan Dubljevic y Latavious Williams
VALÈNCIA. La derrota de la pasada jornada de Liga Endesa ante el Real Madrid en el WiZink Center volvió a evidenciar que Valencia Basket necesita como sea continuar con su casi imbatibilidad en la Fonteta, para que los partidos a domicilio no pasen demasiada factura en la clasificación. La realidad es que de las 8 derrotas de los taronja esta temporada, 7 han sido lejos de su casa. La última supuso ceder la tercera plaza de la clasificación al Baskonia y ahora los de Vidorreta ocupan la cuarta, con sus perseguidores en la lucha por la plaza de Euroliga pisándoles los talones. Al mismo tiempo que Valencia Basket necesita urgentemente volver a ser fiable a domicilio, también debe continuar protegiendo la Fonteta para alcanzar el objetivo.
La enfermería taronja parece que está lejos de volver a vaciarse. Muy poco le duró a Vidorreta con Antoine Diot como único efectivo. El técnico vasco pierde seguro para este partido a Fernando San Emeterio, que se lesionó en Euroliga el pasado jueves (pinchazo en el gemelo izquierdo) y Guillem Vives, que ya causó baja para el Panathinaikos (tenosinovitis en el tobillo izquierdo). También están las dudas del regreso de los pívots, que no estuvieron en Atenas, Bojan Dubljevic (tendinitis aquílea en la pierna izquierda) y Latavious Williams (esguince tobillo derecho).
Vidorreta podría forzar a sus 'cincos', pues cada partido de liga a estas alturas de la temporada se torna vital, o podría dar minutos a Tryggvi Hlinason como ya hiciera en el partido de Euroliga ante el Panathinaikos con buenas sensaciones del islandés. Sergi García también necesita continuar teniendo oportunidades, pero lo más probable es que el técnico decida continuar manteniéndolo apartado en competición doméstica ante unos Sam Van Rossom y Alberto Abalde en buen estado de forma, especialmente este último ante los aficionados taronja. El base balear también disputó algunos minutos en Atenas pero podría volver a quedar relegado al banquillo.
Por parte de UCAM Murcia, Ibón Navarro tiene la ausencia segura del base Alberto Martín y la duda de José Ángel Antelo por una sobrecarga en el tendón de Aquiles. El conjunto murciano tiene una plantilla con mejor salud que la del Valencia Basket y tratarán de aprovecharlo para seguir luchando por los puestos del playoff. Ocupan actualmente la décima posición y, con un balance de 12-12, están ahora a tres victorias del equipo que ocupa la octava posición, el MoraBanc Andorra, que ganó ayer a Tecnyconta Zaragoza. Los de Ibón Navarro llegan con una gran dosis de confianza en sus filas. Esta semana fueron capaces de sacar una victoria por 14 puntos en la pista del Pinar Karsiyaka en la Basketball Champions League en la ida de los cuartos, en un muy accidentado partido.
El conjunto taronja tratará de fulminar a su rival con el poderío ofensivo que le caracteriza, especialmente en la Fonteta. Valencia Basket es el equipo que más triples mete por partido (10,6) y con mayor porcentaje de acierto (41,1%). UCAM Murcia tratará de hacer valer su condición de la mejor defensa de la Liga Endesa, encajando solo 75,8 puntos por choque. Una fortaleza de los murcianos que también posee el conjunto taronja ante su público. En los últimos tres partidos de competición doméstica en Valencia, los de Vidorreta han dejado siempre a su rival por debajo de los 70 puntos. La capacidad ofensiva y la intensidad defensiva resultan un cóctel mortal para cualquier rival en la Fonteta.