El año 2015 ha supuesto la despedida de Valencia del tenis de elite tras anunciar que el torneo no volverá a celebrarse en la ciudad ante el impago por parte de la Generalitat de las cantidades acordadas en las dos últimas ediciones
VALENCIA. El año 2015 ha supuesto la despedida de Valencia del tenis de elite tras anunciar Juan Carlos Ferrero, director de este Abierto, que el torneo no volverá a celebrarse en la ciudad ante el impago por parte de la Generalitat de las cantidades acordadas en las dos últimas ediciones.
La crisis económica en España, así como la reducción de los patrocinios institucionales ya abocaron al torneo a rebajar para este año la categoría de Open 500 a la de 250, tras un intercambio con el torneo de Viena y así poder disminuir significativamente los costes de su organización.
A estos problemas se sumó la negativa de la cesión a la organización del edificio del Ágora para albergar la pista central del torneo, al aducir problemas de seguridad, lo que obligó al montaje de una gran carpa, que al margen de reducir a la mitad el aforo, dejó al torneo sin su gran icono e incrementó los gastos previstos en esta partida.
Ante esta tesitura y las pérdidas acumuladas en los últimos años por la organización, a la conclusión de la edición de este año se anunció que el torneo dejaría de disputarse en Valencia.
A falta de confirmación oficial, los propietarios del torneo venderán los derechos a una ciudad belga todavía no concretada.
El torneo que se disputó inicialmente en 1995 en Valencia, se trasladó a Marbella en 1996 y 1997, y posteriormente a Mallorca, hasta que fue adquirido en 2003 por Juan Carlos Ferrero.
La de aquel año, así como las cinco ediciones siguientes, se celebraron en el Club de Tenis Valencia sobre tierra batida y con una categoría de 250.
Ferrero, que en aquel año fue número uno mundial, ganó esa primera edición, aunque posteriormente nunca tuvo mucha fortuna en su torneo, escenario que eligió en 2012 para retirarse del tenis profesional.
Valencia significó además el primer título importante para entonces jóvenes tenistas como Fernando Verdasco, Nicolás Almagro o Marcel Granollers, además de ser una cita ineludible para la mayor parte de la 'Armada Española' durante más de una década.
Por la arcilla valenciana pasaron tenistas del calibre de un jovencísimo Rafa Nadal, o algunos ya consagrados como Marat Safin, Gustavo Kuerten, Nikolay Davydenko, Fernando González o Gaston Gaudio, entre otros.
En 2009, tras los cambios en el calendario de la ATP, Valencia consiguió ganar una las plazas para albergar un torneo de categoría 500 y la competición se trasladó de fechas y escenario.
Así pasó a jugarse en la emblemática Ciudad de las Artes y las Ciencias y se convirtió en un torneo sobre pista rápida cubierta.
Así, pasó a ser uno de los referentes de la categoría 500, aunque contó desde un inicio con el problema de compartir semana con el de Basilea, que mostraba un mayor poder económico.
Esta circunstancia impidió al torneo valenciano contar con figuras como Rafa Nadal, Novak Djokovic o Roger Federer, pero pese a ello, Valencia contó en su cuadro con numerosos 'top ten'.
Además, en esa nueva etapa el primer título fue para una de las grandes figuras del panorama tenístico: el escocés Andy Murray, que repetiría éxito en 2014.
David Ferrer, que se convertiría en socio de Juan Carlos Ferrero al frente del torneo, ha sido el que más finales ha jugado en las trece ediciones disputadas, con un total de cinco de las que ganó tres.
El resto de campeones en Valencia durante estos años fueron Almagro (2), Murray (2), Ferrero, Verdasco, Youzhny, Andreiev, Granollers y Joao Sousa, último vencedor tras derrotar en la final de la edición de este año a Roberto Bautista.
Una vez se consume la venta de los derechos del torneo, España contará para el próximo año con dos torneos ATP, el Masters 1.000 de Madrid y el Conde Godó de Barcelona.