El base belga tuvo que abandonar la pista en camilla por un golpe en la espalda tras recibir una falta en una bandeja
VALÈNCIA. Lo que más temía Valencia Basket ha ocurrido. Van Rossom, único base sano hasta este momento, ha sufrido una aparatosa caída tras recibir una falta en una bandeja. El belga, incapaz de levantarse por su propio pie, ha tenido que ser sacado de la pista en camilla por lo que parece ser un fuerte golpe en la espalda a falta de 14 minutos del final de partido. La Fonteta se ha quedado helada.
No se sabe todavía el alcance de la lesión del jugador ni cuál es exactamente la zona afectada pero ha sido trasladado al hospital para examinarle. Antes de su marcha, se ha visto a Juan Roig abandonando la pista, probablemente para interesarse por el estado de Van Rossom.