VALÈNCIA. Txus Vidorreta, entrenador del Valencia Basket, se mostró satisfecho por haber podido tener una jornada de descanso y por tener una semana más tranquila antes de visitar el jueves al Fenerbahce en la Euroliga, ya que cree que necesitaban gasolina porque "el tanque estaba vacío".
"Estamos recuperando gente y aunque alguno habría dicho que mejor haber jugado el martes por la racha que llevábamos, necesitábamos el descanso", confesó en rueda de prensa.
El entrenador admitió que el balance de tres triunfos y una sola derrota en la Euroliga les permite afrontar con cierta calma las visitas a las canchas del equipo turco, vigente campeón, y a la del CSKA de Moscú de la siguiente semana.
"Llegamos en una buena disposición a visitar dos de las canchas más complicadas de Europa. El trabajo y el rendimiento nos hace ser optimistas en cuanto a la competitividad y tener muy claro que tenemos que hacer las cosas muy bien porque los dos penalizan cada una de las situaciones de las que disponen", recalcó.
"El Fenerbahce tiene una plantilla enorme y probablemente recuperen a Dixon. Es una plantilla de primerísimo nivel y están dirigidos por el mejor entrenador europeo de la historia (Zeljko Obradovic), así que es un partido que todos queremos jugar, empezando por los jugadores y siguiendo por mí", añadió.
El entrenador del conjunto valenciano dijo que quieren extender la "buena imagen" que han dado hasta ahora y "competir hasta bien entrado el último cuarto porque así puede aparecer la opción de triunfo".
Respecto al hecho de que el equipo otomano tenga un balance de dos triunfos y otras tantas derrotas recordó que "ha perdido dos partidos que podía haber ganado, en Málaga estuvieron por delante y acabaron perdiendo por un punto y en la pista del Panathinaikos perdieron con un triple en el último ataque", aseguró.
Vidorreta explicó que aunque Damjan Rudez, el último fichaje del club, volverá a estar disponible, su idea es que empiece a entrar de verdad en la rotación en el duelo del domingo ante el San Pablo Burgos en la ACB.
"La Euroliga es muy exigente, si lo necesitamos, lo utilizaremos pero, aunque su mentalidad es buena y está preparado para jugar, necesita entrenamientos. El partido contra el Burgos será el primero en el que ya de planteamiento inicial considere que tiene que disputar minutos. Contra el Fenerbahce será si lo necesitamos", explicó.
El entrenador vasco señaló que el cambio de horario del encuentro ante el San Pablo, que ha pasado de las 12:30 a las 18:00 horas del domingo, no partió de él pero que le consultaron y dio el visto bueno porque "jugar por la tarde nos da unas horas más de descanso".