Yo no ficharía a (casi) nadie

VALENCIA. Ya sé que estamos en tiempos en los que parece que fichar cualquier cosa es la panacea, que hay quien vive para hablar de contrataciones y fliparse con todo tipo de teorías o pseudo informaciones. Y más, que mueren de ansiedad o estrés si a las dos horas de finalizar el campeonato no les han presentado a 15 fichajes de postín.

En realidad, pocas veces es necesario fichar. Pero mira, se han montado el negocio así para ganar euretes. Y la gente lo compra, ejerciendo de ariete contra sus propios clubes sin darse cuenta de que sus pasiones están siendo dirigidas por maquiavélicos tratantes.

El otro día vimos a un espantajo como Mustafi demostrando que no olvidó defender. Estaba en Alemania, donde se le exige y no tiene bula si yerra. Que los jugadores no se sientan intocables es importante. Allí, está rodeado de jerarcas que le arrancarán la cabeza como ose tapar sus ridículos haciendo aspavientos y señalando a compañeros ante sus propias torpezas. Seguramente veremos a muchos otros hacer cosas que creíamos extraviadas en cuanto se pongan a jugar por ahí, en entornos sanos y grupos en dinámica positiva. A lo Banega en Sevilla.

Yo no ficharía a (casi) nadie por muchos motivos. El primero, porque lo que se fichó durante el último curso está por estrenar. Y no veo que ninguno sea cojo. Ni siquiera inútil. Simplemente necesitan encontrar un grupo bien ensamblado, con las ideas claras y los roles definidos para poder desplegar su fútbol. Los fichajes a realizar son esos, recuperar jugadores difuminados y sanar ambientes turbados.

La principal tarea, realmente, debe ser expulsar a tipos que no han querido entrenarse ni mejorar su forma física al considerarse divos. Mis fichajes serían traspasos. Más bien, me gastaría el dinero en rescindir algún contrato si no hay quien te los compre. No sólo ahorrarás millones al año, sino que ganarás a jugadores como Rodrigo. Expulsado del XI para dar cabida a esta clase de elementos tóxicos.

Podría afirmar que no ficharía a (casi) nadie porque durante el próximo curso apenas vas a tener que disputar 38 encuentros de liga, y con mucha suerte, 6 de copa, y que para ese camino no hacen falta tantas alforjas. Pero también es porque en los tres últimos años se produjo un trasiego entre cesiones, ventas y compras que suman 67 movimientos de mercado. Sin contar corbatas de banquillo. Esto es, que no has dado estabilidad ninguna para cuajar equipo alguno.

Es cierto que se necesitan cosas. Pero tal vez las cosas que necesite el Valencia no pueda ficharlas, y las que pueda fichar, tal vez, no las necesite. Se trata, lo que se llama en lenguaje político, de hacer un reajuste con aquello que tienes puesto. Mire usted, no son necesarios tres porteros. Con Ryan, que es más joven y mejor, sobra. Y si hace falta el dinero, vender a André Gomes, que no es más que una duplicidad, por una gran suma.

Entiendo que es muy tentador proclamar el derribo. Pero hay cosas a rescatar. Es un lujo tener a un centrocamista que anote 11 goles por temporada e invente 7 asistencias por curso. Unas bandas que den 18 goles y generen 10 las querría cualquier equipo. O a un delantero que en sus tres años en la élite, y en mitad de dos desastres, perfore la meta 15 veces por año y regale 8 más por el camino a sus 22 primaveras. Verdaderamente, el problema del Valencia está en su forma de defender. En la ausencia de un grupo que capitalize todos esos números trabajando como uno solo.

En definitiva, que los fichajes, este verano, los tiene que fabricar Pako Ayestarán en el stage de pretemporada. Si no es capaz de hacerlo, ya pueden traer a Messi, que ni así arreglaran nada.