VALÈNCIA. Carlos Soler volvió a competir. Lo hizo con la selección olímpica española este sábado a mediodía en Kobe (Japón). España, en su primer y único amistoso de preparación para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, empató a uno contra Japón. Carlos Soler, aunque de forma accidental, introdujo el balón en la portería japonesa después de un disparo de Víctor Puado. El valenciano disputó los últimos 35 minutos de partido ante la selección anfitriona.
Soler atendió a la Cadena COPE tras el partido desde el hotel de concentración de la selección española. El jugador del Valencia, preguntado sobre el futuro de su buen amigo José Luis Gayà, manifestó que al de Pedreguer le gustaría quedarse en el club de Mestalla. "A Gayà le gustaría quedarse en el Valencia, pero tampoco soy nadie para hablar de su futuro. Nosotros queremos que se quede”, dijo, utilizando el verbo en condicional.
El mediocentro reveló, además, una llamada de Bordalás, su nuevo entrenador en Mestalla, para desearle suerte: "Yo ahora mismo estoy centrado en disputar los Juegos Olímpicos y en llevarnos el oro. Cuando vuelva, me pondré a las órdenes de Bordalás y del equipo. Hable con el entrenador solo para saludarnos y me dio la enhorabuena por la participación en estos Juegos”.
Soler admitió que este curso había madurado en el Valencia. "Este año me ha tocado por veteranía y por partidos jugados en el Valencia, ser uno de los capitanes. Es algo muy importante que no se cumple todos los días, es una responsabilidad y un honor”, apuntó.
“La temporada no ha sido la que nos hubiese gustado a todos, pero tenemos que intentar olvidar el pasado y centrarnos ahora en los juegos y luego, en mi club”, finalizó.