ALICANTE. El Elche votará este jueves a favor del acuerdo de LaLiga con el fondo de inversión CVC Capital Partners por el 10,95% de sus derechos audiovisuales durante 50 años. Así se lo ha adelantado el club franjiverde a la patronal por boca de Christian Bragarnik, que estará representando a la entidad en Madrid, en la reunión extraordinaria de la Asamblea General en la que se votará si se suscribe o no el citado acuerdo.
En la misma, que arrancará a las 10:30 horas, será necesario el voto favorable de 32 de los 42 clubes miembros (una mayoría reforzada) para que se ratifique la decisión adoptada (por unanimidad) hace justo una semana por parte de la Comisión Delegada de seguir adelante con la operación.
Finalmente el Elche no ha celebrado ningún consejo de administración para decidir el sentido de su voto.
Préstamo participativo
El acuerdo con CVC es por 2.700 millones de euros y encierra un préstamo participativo de algo más de 2.500. Hace una semana, desde LaLiga se cuantificaba en 35 los millones que le corresponderían al Elche, pero hay muchas dudas sobre si finalmente los criterios de reparto permitirán esa inyección de capital, que no deja de ser un préstamo a largo plazo, a devolver entre 40 y 50 años, y con un interés del 0%.
Cada prestatario tiene tres años para gastar o no una suma que ha de destinar en un 70% a la mejora de infraestructuras como estadios, ciudad deportiva (el Elche tiene sobre la mesa la construcción de la misma), tecnología y comunicación digital, en un 15% a amortizar deuda financiera y en otro 15% a fichajes (el límite salarial de se incrementa un 15%).
Precisamente esto último, la posibilidad de incrementar el límite salarial, es lo que animará a muchos clubes a votar a favor.
Real Madrid, Barcelona y RFEF
La mañana de este miércoles, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) se sumaba a Real Madrid y Barça en su oposición al acuerdo.
En un comunicado, la Federación se refería al mismo como "totalmente ilegal", llegando a acusar al presidente de LaLiga, Javier Tebas, de buscar convertirse en presidente de la sociedad 'LaLiga Impulse' (a cuya constitución obliga el acuerdo) para "percibir nuevos emolumentos y eludir los ya de por si pocos controles que ahora se le imponen".
La RFEF sostenía que su oposición responde "a razones legales", advirtiendo que generará numerosos litigios que pueden poner en duda su propia viabilidad, pero también "a razones económicas, dado que se gravan intensamente los derechos de los clubes y Sociedades Anónimas Deportivas para los próximos cincuenta años a cambio de una cantidad de dinero poco significativa".
Desde Las Rozas entienden que "el acuerdo acrecienta la desigualdad e imposibilita de una manera capital y definitiva una evolución razonable del formato de la competición".
Antes que la RFEF, Real Madrid y Barcelona ya mostraban su oposición con sendos comunicados en los que denuncian que supone hipotecar la economía de los clubes por un largo periodo, en particular los relativos a los derechos audiovisuales.
"Este mismo fondo oportunista es el que intentó sin éxito acuerdos similares con las ligas italiana y alemana. El Real Madrid no puede apoyar una operación que regala a unos inversores el futuro de 42 clubes de Primera y Segunda División y el futuro de los clubes que se clasificaran durante estos 50 años", afirma el Real Madrid, que ha llegado incluso a anunciar que emprenderá acciones legales contra Tebas; contra Javier de Jaime, responsable del Fondo CVC; y contra el propio Fondo CVC
El Barça, por su parte, considera "inapropiada la firma de un contrato de medio siglo ante las incertidumbres que siempre rodean el mundo del fútbol" y entiende que "condena el futuro del FC Barcelona en materia de derechos audiovisuales".
LaLiga y CVC no solo insisten en defender el acuerdo ("Cuenta con todos los informes legales favorables", dicen una y otra vez), es que vienen respondiendo con vehemencia a Madrid, Barça y RFEF: en el caso del club blanco, acusándolo "de métodos coactivos y amenazantes"; y en el del organismo que preside Luis Rubiales, de realizar "un escaso análisis de las condiciones" y "afirmaciones carentes de fundamento".