Ramírez: "Esto es muy largo"

ALICANTE. Contento pese al resultado se mostraba este domingo el presidente del Hércules, Juan Carlos Ramírez cuando era preguntado por sus sensaciones tras el partido inaugural del equipo, en el que este no fue capaz de pasar del empate ante el Olot, un recién ascendido.

Ramírez hacía para Alicante Plaza un análisis muy similar al del técnico, Gustavo Siviero tras el encuentro: "Estoy contento en líneas generales (...) nos faltó fluidez en la primera parte pero también es cierto que el césped no ayuda y el rival también juega (...) el Olot demostró que es un buen equipo" señalaba el máximo mandatario blanquiazul que se mostraba seguro de que con el paso de los días, "una vez se vayan compenetrando los últimos fichajes", el equipo empiece a mostrar su verdadero nivel. 

La mezcla de veteranía y juventud que caracteriza a la plantilla 2017/18 del Hércules ilusiona a un Ramírez que no esconde que se ha hecho "una apuesta clara" para poder contar con "un equipo de garantías" porque "este club necesita ascender para poder cumplir sus compromisos" con los acreedores. El presidente se mostraba satisfecho con el trabajo de la comisión deportiva con Javier Portillo al frente; no negaba que se mantienen "atentos al mercado para reforzar aún más la posición de nueve" con un segundo punta que acompañe a Carlos Fernández, si bien recordaba que "Berrocal es jugador del Hércules". 

Por cierto, Ramírez restaba importancia a que rivales directos como el Mallorca, Alcoyano o Valencia Mestalla sí hubiesen sumado los tres puntos en el estreno: "Hay que ir partido a partido (...) esto es muy largo y, después de tres años, la ventaja con que contamos nosotros respecto a otros es que es algo que sabemos bien".   

Terreno de juego

El presidente no esconde su desazón con el mal estado del césped, "todo y los esfuerzos que está haciendo la empresa de mantenimiento y el propio club" que por ejemplo, a nivel económico, cifra en "9.000 euros solo de gasto en agua en el mes de julio"; una cantidad que, esos sí, puede quedar en nada "si hay que levantar el terreno de juego", algo que costaría "unos 150.000 euros" pero que constituiría un desembolso imprescindible "para evitar que la Federación no opte por otro estadio" para la disputa del España-Albania de clasificación para Rusia 2018 del próximo mes de octubre.